Los beneficios que tiene para la salud el consumo de al menos dos litros de agua diarios ya son conocidos por todos, y es una de las recomendaciones esenciales al momento de comenzar una dieta saludable.

Sin embargo, hay muchos que la prefieren embotellada, por lo que su consumo, al igual que otros productos, también viene con fecha de vencimiento.

Ahí surge la pregunta de si es aconsejable o no tomarla una vez que pasó la fecha de vencimiento, ya que a pesar de no echarse a perder, ni contaminarse por hongos o bacterias, el envase plástico es el que podría causar problemas al contenido.

De acuerdo al sitio Salud 180, el plástico no se descompone pero con el tiempo pude desprender ciertas sustancias como los ftalatos, elementos utilizados para ablandar y hacer más resistentes los plásticos, los cuales sí pueden tener un efecto nocivo para la salud.

Según la organización de Reino Unido, Chem Trust, encargada de proteger la salud de las personas y los animales de los efectos de productos químicos dañinos, los ftalatos pueden provocar entre otros efectos: deformaciones genitales, reducción del tiempo del embarazo, infertilidad y cáncer testicular.

Además de los ftalatos está el bisfenol A, que de acuerdo a información entregada por la Universidad Católica de Australia, pueden causar: afecciones en el sistema nervioso central, en la hormona tiroidea diabetes e incluso cáncer.

Ante ello, lo recomendable es siempre mirar la fecha de vencimiento de los productos y respetar su duración para evitar eventuales problemas en la salud.