Pocas parejas actualmente duran tanto juntas como la de Warren y Joan Sell Chapple, quienes durante 70 años unieron sus vidas en matrimonio.

Con el tiempo la salud de ambos se fue deteriorando y el alzheimer hizo que Joan tuviera que alejarse de Warren durante un tiempo cuando fue internada en un asilo en Nueva York.

Según consignó Publimetro y Times Union, Warren no dejó de visitarla día tras día, siempre y cuando su salud se lo permitiera.

Era amor por su esposa era tal que incluso le llevaba el desayuno y se quedaba con ella por lo menos 3 horas. Según su hijo Marc, Warren vivía para entregarle amor a su madre.

Sin embargo, un día Warren fue diagnosticado con cáncer de esófago y no pudo manejar los 16 kilómetros que lo distanciaban de su amada, por lo que dejó de verla el 28 de enero.

Con el paso de las semanas, Warren le preguntó a su hijo por Joan, pues se percató que estaba muy distinto, a lo que él le contestó que ya había partido y entre lágrimas le dijo que ahora él podía irse.

Solo pasaron 24 horas y Warren falleció, de seguro para volver a ver su amada Joan.