Formar a hijas seguras, valientes y empoderadas es una necesidad imperante en estos tiempos en que aún el machismo domina varias esferas de nuestra vida.

Es por eso que una madre estadounidense decidió deshacerse de los prejuicios y enseñarle una valiosa lección a su hija respecto a lo importante que es amarse a sí misma y ser segura.

https://www.pagina7.cl/notas/sociedad/inspirador/2017/07/11/joven-saco-aplausos-tras-denunciar-a-su-jefe-de-discriminador-no-lo-dejo-usar-maquillaje.shtml

Adrian H. Wood es la mujer detrás de esta historia, quien a través de la página de Facebook de su blog Tales of an Educated Debutante blog, comparte a menudo historias de su vida relacionadas a la crianza de sus cuatro hijos, sin embargo, esta vez fueron las propias inseguridades de Adrian las que se tomaron la discusión en un reciente post.

“Amándome” es el título que recibió su texto, en el que detalla su problema de usar bikini en la playa, señalando que siempre se sintió tan complicada que optó por usar un traje de baño que cubriera gran parte de su cuerpo. “¿Vas a nadar? ¿Dónde está tu blusa? Las preguntas de mi hija. Ella cumplirá ocho años este domingo y ella solo conoce a su madre bañándose con una blusa. ¿Cuándo me convertí en esa persona?“, comenzó diciendo.

Y continúa: “‘Solías ser tan segura’, me digo a mí misma. Solía amarme ¿Por qué eso importa? ¿Importa realmente? ¿A quién? A ella sí. La niña que analiza a su madre en cada paso y sí, incluso en cada camisa“.

Es por eso que un arranque de confianza y determinación, la mujer se atrevió a lucir un bikini que si bien la hizo sentir un tanto incómoda y avergonzada, igualmente lo llevó con seguridad.

Abdomen pálido, pechos grandes, torso grueso. No me había expuesto así en una playa desde que me convertí en madre por primera vez. ¿Por qué no? Es esa voz. Esa voz que me obliga a cubrirme, la que me susurra en el oído que ya no soy tan joven, la que me recuerda cada defecto, la celulitis y la flacidez“, detalló en su publicación.

Por último, describió cómo ha logrado lidiar con estas ‘imperfecciones’ y callar esa incómoda voz que intenta apagar su valentía.

“Eres imperfecta, me digo. Cicatrices, heridas de batalla, una marca de cesárea, ninguna es bonita pero cuentan una bella historia.

Eres suave, me digo. Cuatro bebés apoyaron sus cabezas en tus pechos cada noche.

Eres mayor, me digo. Estoy en mis 40 y con esta edad, he madurado y aprendido (y sigo aprendiendo) a silenciar la voz que me dice que no soy suficiente.

Soy suficiente. Soy más que suficiente. Soy fuerte. Soy imperfecta y me amo con todo mi corazón.

¿Dónde está mi camisa? Bueno, cariño, no la necesito más”.

La publicación ha conseguido miles de ‘Me Gusta’ y cientos de comentarios y compartidos que celebraron su determinación, valentía y por el mensaje que le estaba entregando a su hija.