“Querido Santa, mi nombre es Kelly y tengo 12 años”. Así comienza una conmovedora carta al Viejito Pascuero que Andrea Páez, hizo llegar a CHV Noticias.

La mujer, que buscaba apadrinar una de las misivas enviadas a Correos de Chile, en el marco de su campaña para apadrinar los sueños de niños y niñas en Navidad, expuso el sensible anhelo de la pequeña.

En el documento, escrito de su puño y letra, la menor de edad pidió ayuda para tener una casa, ya que vive en una pieza con su hermana, su hermano con síndrome de Down, su mamá y su abuela.

Cabe señalar que esta última debe pagar el arriendo con su pensión.

“Esta Navidad solo te quería pedir una ayudita, ver si me puedes ayudar a conseguir un lugar para vivir, ya que vivimos en la playa (Antofagasta) con una señora que trata mal a mi mamá y nos echa todo el tiempo a la calle”, dice la carta de Kelly.

“Nos queda poco tiempo, porque nos desalojarán, y estoy algo preocupada, se nos cae el pelo, a mí y mi hermana por el estrés que nos lleva esta situación“, agregó sobre su dramático panorama.

Pero no solo eso, pues también reveló que “mi mamá está sin trabajo por cuidarnos a nosotros. Solo vivimos con la pensión de mi abuela que no es mucho”.

Carta niña 12 años a Viejito Pascuero
CHV

“Estamos muy mal, solo deseo tener un lugar para vivir y bañarme decentemente. Hacer una vida normal”, acotó la niña de 12 años, quien conmovió por su humildad, en caso de que el Viejito Pascuero no pueda cumplir su deseo.

Si no puedes, no importa, todavía tendré la esperanza que tendremos un lugar digno para vivir. O si no, algún panel solar para poder tener luz e irnos a vivir al cerro. Solo queremos irnos de acá. Mi mamá llora siempre”, confidenció.

¿Qué dijo la madre de Kelly?

CHV Noticias se comunicó con la madre de la niña, quien se refirió a la carta que escribió su hija.

“Ella me dijo que había escrito que no teníamos casa, es que llegó un límite… ese día me vio llorando, para ella fue muy desesperante, quiere puro irse de acá”.

“Lo único que quieren es vivir tranquilas, tener donde bañarse tranquilamente, sin que las estén hostigando”, comento la angustiada mujer.

Asimismo, planteó que “mi hija me dice ‘mamá, me gustaría tener una pieza, que mi hermano pudiera jugar con amigos, porque acá es solo’. Ella es súper amorosa en ese sentido“, afirmó.

Finalmente, comentó: “No queremos que nos regalen una casa, sino que nos ayuden a salir de acá, porque sufrimos violencia. Que nos puedan ayudar a obtener una casita pagándola, pero de a poco, o un lugar para arrendar”.