Después de haber estado distanciados durante 20 años, Stacy Brook, una joven inglesa de 31 años, volvió a ver a su padre, Mark Brook, pero el reencuentro terminó con un horrible ataque.

Stacy, madre de cuatro hijos, había terminado con su novio y no tenía lugar donde ir, por lo que un familiar le sugirió contactarse con su padre, quien vivía en Sheffield, South Yorkshire, Inglaterra, informó Mirror.

“Al principio, era realmente encantador, nos llevábamos tan bien que no podía creer lo bien que estaban las cosas”, contó la joven.

Sin embargo, “pronto se volvió extraño, casi un poco obsesionado conmigo y odiaba que tuviera un nuevo novio”, aseguró.

Ella afirmó que su padre era “celoso” y “obsesivo” con ella, e incluso le “rogó” que no se fuera a vivir con su actual pareja.

El ataque

El 9 de agosto del 2021, después de una pelea por teléfono, sobre su ex y el dinero, Mark irrumpió en el lugar donde se hospedaba su hija y, después de golpearla, la cubrió con una mezcla de gasolina y otro líquido inflamable.

Afortunadamente, el encendedor no funcionó, por lo que su padre huyó de la escena. Aterrorizada, Stacy llamó a la policía y Mark fue arrestado ese mismo día.

El hombre le dijo a la policía que había estado buscando al novio de su hija y quería que ella volviera a casa. Además, se excusó diciendo que había tomado el doble de la dosis de diazepam, lo que lo había hecho sentir como “King Kong”.

En diciembre del mismo año, el hombre fue declarado culpable de intentar causar daños corporales graves a su hija y de amenazar con matarla. En agosto de 2022, fue condenado a nueve años y seis meses de prisión.

“Nunca fue un buen padre, nunca estuvo allí, pero quería darle una segunda oportunidad“, comentó Stacy y agregó que el ataque “me ha afectado mucho, siempre estoy ansiosa ahora”.