“¿Asistir a un funeral en zapatillas? ¡Pero qué vergüenza!”, criticaron los internautas en las redes sociales al conocer la vestimenta que el presidente de Francia, Emmanuel Macron, eligió para llegar a Londres y participar de las ceremonias fúnebres de la reina Isabel II.

En efecto, numerosas imágenes que circulan en redes sociales muestran a Macron y su esposa Brigitte, caminando por las calles de Londres, tomados de la mano y vestidos ambos con pantalones de estilo casual.

Además, usaron blazer, zapatillas deportivas y anteojos oscuros, rumbo a Westminster, en donde los estaban esperando para el sepelio del siglo.

Las fotos se tomaron el 18 de septiembre, un día muy emotivo para los británicos, ya que a partir de las 11 horas de la mañana, despidieron los restos mortales de su reina, de 96 años.

No obstante, pese a la indignación, a nadie se le escapó que la pareja presidencial se presentó luego correctamente vestida a la capilla ardiente en el histórico Hall de Westminster, para expresar sus condolencias al círculo de la monarca.

Brigitte usó tacos aguja y medias de seda negras y él, un traje oscuro con calzado formal.

Macron en zapatillas al funeral de la reina Isabel II

¿No tuvieron tiempo de cambiarse en el avión?

La prensa británica -y también algunos medios franceses- se preguntaron si al presentarse así en Westminster, Macron realmente rindió un homenaje a la reina más longeva de Europa.

Varios especularon con que, tal vez, ese look “de incógnito” fue ex profeso, para poder palpitar de cerca el sentimiento del millón de británicos, en la fila de espera de quienes se concentraban en las calles de Londres para el último adiós.

En los alrededores de Westminster, Emmanuel Macron lucía un blazer azul marino y un pantalón gris oscuro con zapatillas deportivas negras con detalles blancos; su esposa Brigitte tenía un look muy parecido.

Del mismo modo que el emperador Naruhito y la emperatriz Masako de Japón, Macron avisó que se trasladaría por su cuenta hasta Westminster y luego al Palacio de Buckingham.

Unas 2.000 personalidades del mundo político recibieron la invitación para asistir a los funerales de Estado, pero unos 200 mandatarios fueron recibidos a su turno por el nuevo monarca, Carlos III, en el Palacio de Buckingham, en su primer encuentro diplomático oficial.