Agentes de la Policía Nacional, con la colaboración de Europol, Interpol y la Policía de Queensland (Australia) han detenido a dos peligrosos agresores sexuales de menores que habían compartido material pornográfico infantil en la Deep Web.

Uno de ellos, de 58 años, fue arrestado en Sevilla por presuntamente abusar sexualmente de su nieto de 13 meses, grabarlo y subirlo a Internet.

El segundo, resultó detenido en Valencia como posible responsable del abuso sexual de dos niñas a lo largo de diez años, que fotografiaba y grababa los ilícitos para distribuirlo en foros y mensajería electrónica.

La primera operación se inició tras detectarse en la Deep Web, una serie de fotografías de una niña de unos 12 años, tomadas probablemente por la misma persona que las había colgado, puesto que se contaba una historia en inglés sobre su origen y se atribuía su creación.

¿Cómo localizaron a sujeto que compartía material pornográfico infantil?

Tras comenzar las pesquisas sobre el usuario que había distribuido tales archivos, los agentes hallaron distintas publicaciones que había hecho desde al menos el año 2014.

Asimismo, su forma de escribir en inglés resultaba defectuosa, por lo que los investigadores determinaron que el tipo de errores eran característicos de un hispanohablante.

De este rastreo, los agentes también encontraron otros mensajes efectuados por el mismo cibernauta que compartía pornografía infantil ya conocida, además de conversaciones en español.

Las indagaciones consiguieron identificar a un posible sospechoso, un individuo residente en Valencia que encajaba con el autor de los hechos.

Con todo ello, la autoridad llevó a cabo el registro de su vivienda en el que localizaron abundantes evidencias de que se trataba del sujeto perseguido.

Tras la investigación, el responsable fue arrestado y acusado de abusos sexuales sobre menor de edad, producción y distribución de pornografía infantil, y un delito de descubrimiento y revelación de secretos. 

En el análisis posterior del material intervenido se encontró que también había grabado a su pareja, sin que esta lo supiera, mientras mantenían relaciones sexuales. 

Localizado por un agente de la policía australiana

El segundo caso fue detectado por un agente de la policía australiana que localizó tres fotografías explícitas de un bebé. La persona que se las había hecho llegar aseguraba que era su nieto y que tenía facilidad para acceder a él.

Este intercambio tuvo parte a través de sistemas de mensajería instantánea encriptados y que, además, camuflan la dirección IP a través de la Deep Web, por lo que su identificación se hizo más difícil.

El nombre de usuario que utilizaba esta persona, las erratas cometidas a la hora de hablar en inglés y algunos elementos de las fotografías, llevaron a ubicar a este delincuente en España.

Una vez que se recibió la información, con la colaboración de Europol, las pesquisas mostraron indicios de envío de vídeos de explotación sexual de bebés a través de direcciones IP en Polonia. Esto se debía a que el investigado usaba estrategias para camuflar su conexión a Internet y evitar su detección.

Detención en Sevilla

Finalmente, la autoridad pudo encontrar datos reales que sirvieron para ubicar al sujeto en Sevilla y establecer una identidad, siendo esta la de un hombre de 58 años.

Con todo ello, los agentes se desplazaron hasta dicha ciudad, donde arrestaron al varón y registraron su domicilio en el que se revelaron dos de las fotos que había enviado, así como un sistema para desviar la dirección IP a terceros países.

Además, se localizó una micro cámara que había sido destruida, un arma de fuego ilegal y dos granadas.

Finalmente, el individuo fue acusado como presunto responsable de los delitos de abuso sexual a menor de edad, producción de pornografía infantil, descubrimiento y revelación de secretos, así como tenencia ilícita de armas.