La justicia canadiense dictaminó la suspensión temporal del régimen de visitas de un padre por no querer vacunarse contra el COVID-19 y “oponerse a las medidas sanitarias”.

De acuerdo al medio español El Mundo, la decisión se extenderá hasta el mes de febrero a menos que el hombre decida inocularse, por no “ser lo mejor para el niño”, de 12 años.

Todo se originó cuando el sujeto solicitó la ampliación de sus visitas por vacaciones, a lo que la madre se opuso por descubrir su postura contra las medidas de seguridad frente a la pandemia, la que publicaba en sus redes sociales.

Además, se consideró que si bien el pequeño fue vacunado, este vive (además de con su madre y padrastro) con sus dos hermanos, de 7 meses y 4 años, quienes no pueden recibir dosis debido a su edad.

En estas circunstancias, no es en el interés de ninguno de los tres niños”, determinó el juez.

Cabe señalar que el pequeño reside en la provincia de Quebec que, aunque registra buenos índices de vacunación, se encuentra viviendo un rebrote de casos producto de la variante ómicron.