Samuel Little fue un criminal considerado por el FBI como “el mayor asesino en serie de la historia de Estados Unidos”.

En 2018 confesó 93 homicidios, la mayoría a mujeres, cometidos entre 1970 y 2005, pero su espiral de violencia pasó desapercibido durante décadas.

De acuerdo al documental de BBC Samuel Little: confesiones de un asesino en serie, la mayor parte de sus víctimas eran adictas a las drogas o prostitutas, y en muchos casos nunca fueron identificadas ni sus muertes investigadas.

El sujeto aprovechaba su fuerza y su experiencia como boxeador para golpearlas y luego estrangularlas, por lo que no dejaba marcas de homicidio con ningún arma.

Eso, unido al contexto social de las víctimas, hizo que muchos decesos fueran atribuidos a sobredosis, accidentes e incluso causas naturales.

Además de asesinarlas, Little había guardado en su memoria hasta el más mínimo detalle de los rostros de las víctimas, ya que las dibujó junto con su confesión.

Captura
Captura

Muerte en prisión

Según BBC Mundo, Little estaba encarcelado desde 2013 en Los Ángeles por el asesinato de tres mujeres entre 1987 y 1989, crímenes por los cuales fue condenado a tres sentencias de cadena perpetua.

El exboxeador había acumulado un centenar de arrestos por delitos como secuestro, violación o robo a mano armada durante cinco décadas, pero se las arreglaba para salir de la cárcel.

Samuel Little finalmente murió el miércoles 30 de diciembre de 2020 en prisión a los 80 años.

Para ese entonces, el FBI había comprobado su autoría en 50 crímenes, convirtiéndolo en el mayor asesino serial de los Estados Unidos, superando a Gary Ridgway, condenado por matar a 49 personas.

En una de las grabaciones de sus confesiones, se puede escuchar su voz suave y algo cansada, refiriéndose a sus víctimas, consignó Infobae.

“Las amo a todas, no puedo elegir una favorita. Cuando se mueren todas son tus favoritas, todas te pertenecen. Las veré en el infierno”, dijo.