Un enorme drama vivió la familia de Kyanni Williams, recién nacida de Denver, Estados Unidos, quien tuvo que recibir trece puntos de sutura luego que durante una cesárea de emergencia, le dejaran un enorme corte en la cara.

Según detalló prensa internacional, los padres de la menor de edad habrían planeado tener un parto natural, pero los médicos sugirieron hacer la operación.

El principal argumento de los trabajadores de la salud fue que no escuchaban los latidos del bebé en el trabajo de parto, el cual llevaba varias horas.

“Es devastador”

Los padres de Kyanni Williams habían planeado tener un parto natural, pero los médicos sugirieron hacer una intervención de urgencia.

Que tu nieta nazca para que el cirujano plástico le tenga que dar 13 puntos es devastador”, señaló Walter Williams, abuelo de la niña, a Fox 31.

En tanto, la madre de Kyanni, Reazjhana Williams, expresó que aún está intentando “entender” lo sucedido. “Traté de ser comprensiva sobre lo que sucedió, pero además del hecho de que le cortaron la cara y un cirujano plástico tuvo que venir a darle puntos, hay muchas cosas que no entiendo. Nunca escuché que alguien tuviera la cara de su bebé con este aspecto después de una cesárea”, dijo.

La mujer detalló que en el Denver Health (recinto donde la atendieron) le dieron una pastilla para acelerar el proceso.

Dijeron que nuestro bebé hizo un movimiento repentino, que no pudieron oír los latidos de su corazón ni encontrarlo y la llevaron a una cesárea inmediata”, manifestó el acongojado padre.

La familia afectada afirmó que los médicos les comentaron que el bebé estaba cerca de la pared de la placenta cuando se realizó la intervención quirúrgica.

El citado medio recibió un comunicado de Denver Health, en donde aclararon que “hemos estado en contacto con la familia directamente. Si bien esta es una complicación médica conocida en las cesáreas de emergencia, nuestro enfoque siempre está en brindar atención en el mejor interés de la madre y el niño”.