Hay cientos de casos alrededor del mundo que han conmocionado, respecto a fallecidos a causa del COVID-19. Y uno de los más recientes se registró hace unos días en la región de Santa Fé, en Argentina.
Se trata de Lara Arreguiz, de 22 años e insulinodependiente, que murió esperando atención médica producto del colapso hospitalario por la pandemia, luego de que su cuadro se complicara por una neumonía bilateral.
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Y una de sus últimas imágenes dio la vuelta al mundo: la joven trasandina aparece en uno de los pasillos del Hospital Iturraspe, sin cama ni atención y tapada con una chaqueta que le colocó su madre para capear el frío.
“Vivía sola en Esperanza porque estudiaba veterinaria. Me llamó hace unos días para decirme que estaba descompuesta. La traje a casa y empezó con una tos seca”, comenzó contando Claudia Sánchez, madre de la trasandina, en conversación con Radio con Vos, consigna el diario Crónica.
Tras llevarla a un centro asistencial, le indicaron que tenía neumonía en los dos pulmones y que podía ser COVID positivo. “La sentaron en una silla de ruedas en un pasillo, porque no había camas, colocaron un biombo y le dieron oxígeno durante dos horas. Le bajó el azúcar y se empezó a descomponer“, indicó Sánchez.
Tras esto, realizarse el PCR respectivo, confirmaron que era coronavirus. “Tenía todo para ser internada pero ahí no tenían lugar”, dijo afligida la madre, por lo que se la llevó hasta el Hospital Iturraspe.
“Se puso a llorar y la hicieron ingresar a la enfermería y después otra vez a esperar en un pasillo. Ahí me dijo que se quería acostar, y se acomodó en el piso y yo le puse una campera. Esa es la foto que circuló”, explicó.
Triste descenlace
Finalmente, a los días, le consiguieron una cama a la joven, pero su condición empeoró, por lo que la trasladaron a terapia intensiva, donde la intubaron, momento en que su mamá afirma que perdió el rastro sobre la salud de su hija: “No se comunicaron más conmigo”, acusó.
Lo siguiente que supo sobre su hija es que había fallecido: “Me llamó el papá de Lara para avisarme que había muerto, que había tenido tres paros y no pudieron hacer nada. Es algo horrible, no se lo deseo a nadie”, expresó.
“La gente no entra en razón de lo que está sucediendo. Muchos dicen que todo esto es mentira. Pero cuando te toca en carne propia hay que vivirlo y es lo peor que te puede pasar estar de hospital en hospital con un ser querido y no tener una cama o un médico que te ayuden”, finalizó Alejandro, padre de Lara.
En tanto, Francisco Villano, director del Hospital Iturraspe, dio su versión y aclaró que “Lara estuvo 30 minutos esperando” y que “aparentemente decidió ella esperar en el piso”, consignó Clarín.
“No coincido con los títulos que se le pusieron a esta noticia, de que murió una paciente tirada en el piso esperando una cama. Realmente no es así“, sentenció.
