Sinónimo de sufrimiento, así medios internacionales resumen la historia de Jacqueline Sauvage, quien tras 47 años de maltratos y abusos por parte de su esposo, en 2012 le quitó la vida, originando un caso que dio la vuelta al mundo.

Cuando tenía solamente 18 años contrajo matrimonio con Nobert Marot, con quien tuvo cuatro hijos. Viviendo en el pueblo La-Selle-sur-le-Bied, situado a unos 100 kilómetros al sur de París, su hogar se convirtió en su calvario por continuas agresiones y violaciones.

Pese a esto, el temor a las represalias de parte de su maltratador la llevó a que nunca interpusiera alguna denuncia.

El 10 de septiembre de 2012, todo cambió. Aquella jornada la mujer despertó con un puño en la cara de parte de su pareja, quien le exigió que le preparara algo para comer. Sauvage en vez de obedecer, sacó un rifle de caza del armario, salió al patio y le disparó tres veces por la espalda, detalló el canal español La Sexta.

Ese día juró matarnos a todos… ese día me golpeó“, explicó Jacqueline posteriormente en una entrevista a la cadena francesa TF1.

Además, comentó que “por lo general esperaba a que pasara. Hacerme pequeña, olvidar, ponerme en modo de supervivencia. Ese día fue diferente. Un brillo extraño en sus ojos, una entonación peculiar en su voz, en sus gritos. Vi a mis hijos muertos”.

“Noté el sabor a sangre en mi boca. Ya no pude ver nada. Tenía el arma en mis manos. Cerré los ojos y disparé tres veces”, indicó al citado medio.

Años de cárcel

Esos disparos que para la víctima pudieron resultar liberadores, la llevaron tras las rejas. El 23 de octubre de 2014, más de dos años después del crimen, Sauvage enfrentó a la Justicia.

Aunque el Tribunal cuestionó las agresiones debido a las nulas denuncias en contra de Marot, la acusada expresó que “nuestro silencio se debe a que teníamos que protegernos unos a otros“.

Sabíamos que iba a terminar mal“, confesó, mientras sus hijas también testificaron en contra de su padre, afirmando que sufrieron violencia.

El 28 de octubre de 2014, llegó la sentencia que confirmaba los 10 años de prisión para la mujer.

Revuelo mediático

Este fallo generó un gran debate en la opinión pública francesa, produciendo el malestar de un enorme grupo de personas que salieron a las calles para manifestarse en apoyo de Sauvage, convirtiéndose en un símbolo de la lucha contra la violencia machista.

El primero de diciembre de 2015, y tras un enorme revuelo social en donde distintas personalidades criticaron la sentencia, se celebró un nuevo juicio, pero en esta oportunidad en el Tribunal de lo Penal de Blois. Dos días después, ratificaron los 10 años de prisión.

Los ánimos aumentaron, y en enero de 2016 el presidente François Hollande recibió en el Palacio del Elíseo a las hijas de Jacqueline.

Posteriormente, la autoridad anunció el indulto parcial para la acusada, lo que significaba que la detenida tendría el derecho a pedir la libertad condicional al pasar a tercer grado penitenciario.

Durante agosto de 2016, la Justicia rechazó la solicitud de libertad condicional para Sauvage, lo cual se repitió en noviembre del mismo año.

AFP
AFP

Libertad

Con tan duros antecedentes, causó sorpresa que el 28 de diciembre de 2016 el mandatario francés François Hollande anunciara el indulto total.

“Decidí concederle la remisión del resto de su condena. Esta pone fin inmediatamente a su encarcelamiento“, señaló el presidente en su cuenta de Twitter.

En conversación con Le Parisien, la mujer reveló detalles de aquella jornada. “Mi puerta se abrió y el guardia me dijo: ‘Madame, ¿no ha escuchado la noticia? Usted es libre’. Respondí: ‘¿cómo, de inmediato?’. ‘Sí, en este momento’. Allí levanté mis brazos al cielo y dije: ‘¡gracias, gracias, gracias!’“, confesó.

Jacqueline Sauvage estuvo en libertad por cuatro años. En julio de 2020, a los 72 años, falleció en su casa de La Selle-sur-le-Bied en una estricta reserva, mencionó La République du Centre.