En el valle del río Omo, ubicado en Etiopía, viven unas remotas tribus que se han aferrado a sus tradiciones, logrando sobrevivir por siglos a duras condiciones de vida.
Una de ellas es la tribu mursi, conocida por ser una de las más rudas y por su peculiar definición de belleza. De acuerdo a El Diario Vasco, se calculan alrededor de 10 mil miembros.
También puedes leer
Se ubican específicamente en las estepas del pueblo de Jinka y en las montañas del Omo Park. Al ser un lugar de difícil acceso, tienen poco contacto con el mundo exterior.
Los mursis se dedican principalmente al pastoreo, aunque también cultivan sorgo, cereal con el que elaboran la injera, especie de pan con el que acompañan las comidas.
Tanto hombres como mujeres decoran sus cuerpos con pigmentos naturales extraídos de minerales y vegetales. Los varones se realizan escarificaciones en el cuerpo, como signo de elegancia y fortaleza.
Belleza y apariencia
Las mujeres mursis son conocidas por usar discos en sus labios inferiores. Mientras más grande, más hermosa es considerada.
Aunque es un proceso doloroso, las mursis comienzan a perforar sus labios a los 15 años. Se realizan un corte en el labio inferior y se colocan un tapón de madera para que la herida no cierre, consignó el portal de viajes Vipavi, que visitó a la tribu.
Durante los años siguientes el orificio se agranda debido al tamaño del plato, hasta que se les hace muy fácil ocuparlos, como si fuera un simple accesorio.
Para acentuar la belleza y facilitar su utilización, se arrancan los dientes incisivos inferiores, dejando la punta de sus lenguas visibles.
Los discos o platos pueden ser hechos de arcilla, por parte de las mujeres, mientras que los varones los fabrican de madera.
Con el paso del tiempo, el ornamento se convirtió en uno de los símbolos más reconocidos de esta tribu. A mayor tamaño del plato, más posibilidades de conseguir matrimonio, el que a su vez se consolida con el intercambio de ganado.
Las mujeres también se realizan orificios en los lóbulos de las orejas, donde lucen platos más pequeños mientras están solteras. Significa pasar de niña a mujer.
Al parecer no gustan del cabello, ya que todos lucen con sus cabezas rapadas, tanto hombres como mujeres.
Violento ritual
Los mursis son también conocidos por ser una de las tribus del Omo más rudas y temidas. De hecho, llama la atención que poseen armas y todos las usan, mujeres, hombres y hasta niños.
Practican un singular ritual de violencia masculina denominado Donga, que simboliza el paso de la juventud a la adultez.
Dos jóvenes desnudos luchan cuerpo a cuerpo golpeando a su contrincante con varas de dos metros. Para la pelea, los guerreros se afeitan la cabeza que cubren con un protector fabricado por ellos mismos.
La victoria es muy importante, pues quien la consiga tendrá derecho a elegir esposa. Sin embargo, el enfrentamiento incluso los puede llevar a la muerte.
Revisa a continuación un video de la periodista Daniela Zavala, quien estuvo con los mursis y grabó su experiencia:
