Poco a poco con el fin de las cuarentenas, las rutinas de antes comienzan a tomar forma. Volver al trabajo y/o a clases presenciales, son algunas de las actividades que han regresado después de meses de cuarentena.

Un alivio para muchos, aunque hay algunos miembros del hogar que será más difícil asimilar este proceso (así como les costó acostumbrarse): las mascotas.

Muchos perros y gatos se acostumbraron a estar con sus dueños todo el día en casa. En tanto, según consignó La Tercera, durante este tiempo varias personas han adoptado animales para hacerse compañía durante el confinamiento.

Algo que se grafica con una encuesta realizada en Reino Unido, la que señaló que un 86% de personas afirmó que formó lazos estrechos con sus animales en pandemia y un 63% aseguró que las mascotas han sido mejor compañía que sus parejas.

Por esta razón (y por nuestra propia salud mental también), es recomendable seguir algunas sugerencias antes de dejar nuestros perros y gatos nuevamente más tiempo solos.

Según un estudio de The Journal of the American Veterinary Medical Association de 2001, las mascotas pueden sufrir trastornos de ánimo por la separación con sus amos: entre un 20% a 40% en perros y más de un 13% de los gatos pueden sufrir ansiedad por esta causa.

Pixabay (cc)
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Recomendaciones

El académico de Medicina Veterinaria de U. San Sebastián, Pablo Gómez, explicó al diario citado, que lo mejor para comenzar esta rutina del desapego es dejar “tiempos en que nuestras mascotas permanezcan solas de forma paulatina“. Por ejemplo, dejarlos en lugares donde no esté la familia por un corto lapso de tiempo y luego ir extendiendo la duración día a día.

Es que la idea, dice el especialista, es no exponerlos “a un estrés al que no puedan responder de forma satisfactoria”.

Otro método que puede ayudar en la temporada de “transición”, es dar paseos de 15 minutos e ir extendiendo ese tiempo de forma paulatina y estructurada.

También se debe evitar hacerle caso “en todo” a la mascota. Hay que “intentar que todos tengamos un ‘horario’. Si estamos todo el día haciéndoles caso, acariciándoles, jugando, etc. Será más complicado para ellos el fin del confinamiento, ya que pasarán de tener toda la atención a estar solos“, explicó la médico veterinaria Belén López a Revista Hola.