‘Friendzone’ se le llama a la situación en la que en una relación de amistad de dos personas, una de ellas desarrolla sentimientos más intensos que la otra y desea ser más que amigo o amiga.
En este escenario, lo más común es que alguna vez haya ocurrido algo entre ambos, de índole sexual, pero que no fue determinante como para pasar de una amistad a una relación amorosa de inmediato. Otra opción es que, transparentados los sentimientos, aun así la relación viva en una confusión constante de estos.
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Lo claro es que cual sea el contexto, vivir en la ‘friendzone’ no es para nada agradable, y así lo asegura el doctor en psicología social y personal Jeremy Nicholson, en un artículo publicado en Psychology Today, quien indica que esta situación ocurre porque una de las personas se ha quedado atascada en una amistad que no tiene equilibrados los acuerdos de dar y recibir.
Esto se explica porque, generalmente, una persona está recibiendo todo lo que quiere y la otra no. Y quizá esta última lo hace pensando que alguna vez estos esfuerzos pueden servir como antecedente para pasar a otro tipo de relación.
Por lo anterior, el experto indica que para escapar de esta situación, lo primero es transparentar tus intenciones con la otra persona y, según la respuesta, ya podrás tomar una decisión sobre lo que quieres hacer de ahí para adelante.
Si deseas continuar con la amistad, entonces es necesario que te des cuenta que todas las relaciones implican negociación y que debes “renegociar” este intercambio actual.
En ese sentido, Nicholson da cuenta de cinco consejos básicos para equilibrar la balanza en esta amistad que puede terminar convirtiéndose en una relación tóxica si no se ponen límites.
1.- Muestra menos interés
Como la relación está desequilibrada, porque probablemente uno la valora más que el otro, quizá es pertinente dar un paso atrás.
“Estar ‘necesitado’ no es forma de negociar. Las personas desesperadas terminan recibiendo lo que otros les dan, no lo que quieren. Por lo tanto, muestra menos interés y prepárate para alejarte si no obtienes la relación que deseas“, recomienda el especialista.
2.- No estés siempre disponible
“Intenta pasar algún tiempo lejos de tu ‘amigo/a’ y haz menos por él/ella. Si realmente te aprecia, entonces tu ausencia hará que te extrañe y te valore más. Este es el principio de la escasez, donde las personas valoran algo más cuando es raro o se les quita (Cialdini, 2009)”, advierte.
Lo importante, en este punto, es que la otra persona sienta la pérdida al no tener quien atienda sus necesidades. De esta forma, quizá la persona puede observar y analizar la relación en perspectiva y satisfacer tus necesidades de vuelta.
“Si no es así, entonces simplemente no les gustas tanto” y, en ese caso, es mejor tomar distancia definitiva y fijarte en otra persona.
3.- Crear algo de competencia
“Sal y haz otros ‘amigos especiales’ del sexo que te atrae. Amplía tu red social. Luego, habla sobre estos nuevos amigos con el amigo que deseas. La competencia y un poco de celos son otra gran manera de desarrollar la escasez (Cialdini, 2009)”, asegura Nicholson.
Las personas, lamentablemente, suelen valorar más o estar más atentas a lo que pueden perder. Si ya no concentras toda tu atención en esa persona, quizá se motive más por obtener tu atención y tiempo, algo que también puede ayudar a transparentar de una vez sus intenciones.
Si no se da esto, es probable que “no quiera ser ‘más que amigos’. En ese caso, ¡fija tu mirada en alguien nuevo!”, aconseja.
4.- Haz que invierta
Si quieres que hagan algo por ti, pídelo. El experto señala que, contrariamente a la creencia popular, “a la gente le gustas más cuando te hacen favores, en lugar de cuando les haces el favor. Esto se llama el efecto Ben Franklin (Jecker y Landry, 1969)”.
Lo anterior, lo explica señalando que cuanto más invierten en la relación, más significativa es para ellos. ¿Entonces? ¡Deja de hacer favores y empieza a pedirlos!
5.- Sé agradecido
Es importante ser agradecido y recompensar a tu amigo/a cuando se comporta como deseas y, en ese caso, busca la forma de retribuir en algún otro momento. Esto es vital en cualquier tipo de relación: “mantener siempre un ambiente de gratitud mutua que fluya“.
De acuerdo al doctor en psicología, estos son solo los primeros pasos que pueden ayudarte a cambiar la dinámica de la relación actual, pero de una manera más bien indirecta.
Lo que debes tener claro siempre es que lo primero es la sinceridad y la comunicación, quizá es más simple invitarlo/a a salir directamente en vez de darle tantas vueltas.
Además, debes enfocarte en tu propio valor, en lo que te mereces y lo que deseas en una relación. Quizá a veces nuestra autoestima o incluso la fijación que podemos desarrollar en esta persona, no nos permite ver con claridad si acaso es o no la indicada.
Tampoco puedes obligar a tu amigo/a a pasar a un siguiente nivel, aun cuando hayan involucrado otro tipo de actividades propias de una relación amorosa, quizá. Tener sexo no es un condicionante para una relación de pareja y eso también debes tenerlo claro antes de idealizar cualquier tipo de relación.
