No cabe duda que los últimos dos meses han sido difíciles para muchos dentro del contexto de pandemia que enfrenta Chile y el resto del mundo.

La cuarenta, para algunos obligatoria y para otros voluntaria, ha llevado a miles a realizar todos los deberes desde la casa, lo que también puede generar conflictos de convivencia.

En este contexto, los padres de niños pequeños están cumpliendo la compleja labor de trabajar, organizar el hogar, cuidar a sus hijos, ayudarlos con el colegio y además ser fuente de entretención.

Sobre este tema, Catalina Valenzuela, directora de la Escuela de Psicología de la Universidad de Las Américas (UDLA) señaló a Página 7 que para poder enfrentar este escenario de la mejor manera es importante que existan momentos de ocio, pero también de trabajo.

De acuerdo a la especialista, los adultos deben visualizar y explicar que necesitan tiempo para sus responsabilidades, “visualizando el trabajo como algo de extrema importancia, que lo es”.

Pexels (CC)
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En tanto, los niños de igual forma deben comprender que durante la cuarentena existe “espacio y tiempo de juego y ocio, pero también de hábitos y rutinas”.

“Cuando me refiero a espacios, hablo de momentos, oportunidades en que se valore su necesidad de jugar, tanto como la de un adulto de trabajar. Por lo tanto, un primer desafío es poder ordenar ambas condiciones”, explicó.

Consejos

Valenzuela asegura que el ocio y el trabajo pueden sonar incompatibles, pero la creatividad y la imaginación siempre ayudan. Por ejemplo, se pueden abordar rutinas o actividades de la casa de una manera más lúdica.

“Lavar la loza imaginando que se está en un centro de lavado de autos y que uno pone el jabón mientras otro enjuaga y saca brillo; jugar luche para recoger y botar la ropa sucia al cesto; pasar la escoba o la aspiradora imaginando que es un recolector de polvos mágicos (…) A veces es cosa de dejar volar la imaginación y permitirse hacer las cosas de un modo diferente”, agregó.

En este sentido, la psicóloga también aconseja que se acuerden momentos para pasar todos juntos y que los ayude a distraerse del contexto de pandemia.

“Se pueden dejar reservados espacios diarios para hacer algo juntos que implique jugar, reírse un rato y compartir las cosas de familia, no los trabajos ni la escuela”, apuntó. “Puede organizarse una cena familiar, donde todos tengan un rol y transformar ese rol en algo más lúdico, como que exista alguien que ubique a los comensales, otro que tome el pedido, uno que sirve y pone la mesa, etc.”, añadió.

Por último, la especialista indicó que estos momentos no solo ayudan a ser más llevadera la cuarentena, sino que también a “acercar lazos y generar confianzas”, fortaleciendo así la unidad familiar.