Desde que el coronavirus apareció en el mundo y arribó a Chile, muchas son las interrogantes en torno a él.

Una de ellas se relaciona con los recién nacidos, pues muchas madres que están viviendo un embarazo, tienen el temor del contagio a sus pequeños si ellas llegan a enfermar.

Es en este escenario, que si bien no existe una gran evidencia, en los últimos meses se ha reportado casos en los que se ha encontrado el virus en la placenta o líquido amniótico.

Uno de estos casos se dio en Francia, de acuerdo a un informe publicado por ResearchGate, el que señala que una mujer de 23 años contagiada de COVID-19 dio a luz a las 35 semanas de gestación a su bebé, el que debió ser asistido tras el parto, de manera inmediata por manifestaciones neurológicas similares a las que se han visto en adultos con esta enfermedad. En la oportunidad se indicó que la placenta estaba inflamada y tras el examen de PCR el tejido arrojó positivo al virus, lo que indica que desde la placenta fue el traspaso al pequeño.

Otro caso se presentó en Estados Unidos, y fue dado a conocer por la Universidad de Yale, donde una mujer embarazada presentó repentinamente una Preeclampsia, y tras el examen de rigor se detectó el virus en la placenta.

Ante este escenario Sergio De La Fuente, gineco obstetra y especialista en Medicina Materno Fetal del Centro de Vigilancia Materno Fetal (CEVIM) de Clínica Las Condes, indicó a La Tercera que este tipo de contaminación de madre a feto, ocurre en casos graves.

“En un principio se decía que no era posible, pero con el tiempo se ha podido detectar, en muy pocos casos, virus en el líquido amniótico y la placenta. Aparentemente, es más prevalente en madres que han hecho un cuadro más grave y con gran diseminación viral en su sangre (viremia). Por el momento, al no haber un tratamiento antiviral efectivo, no es posible evitar el pasaje transplacentario del virus” sostuvo.

En la misma línea, Enrique Oyarzún gíneco-obstetra Clínica Universidad de los Andes, manifestó al citado medio que: “Antes de esto se decía que no había transmisión del virus desde la madre al feto en el útero, pero se demostró. Hasta ahora sabemos que no ocurre en todos los casos, que sería alrededor del 1% de los embarazos y en casos de madres que se complicaron con la enfermedad”.

Es por lo anterior que el especialista realizó un llamado a la calma “No es un evento raro o inesperado. El sistema inmunitario de la mujer embarazada está más deprimido y es más susceptible a infecciones. Además, cualquier cosa que le ocurra a la madre, puede también afectar el niño en el útero”, finalizó.