“Estamos en shock”. Con esta elocuente frase, un amigo de la familia de Wogene Debele reflejó el impacto que generó en una comunidad de Maryland, el caso de la mujer de origen etíope.

Lo anterior, luego que Debele falleciera hace algunos días, producto del COVID-19, pero lo hizo sin tener la oportunidad de conocer a su hijo recién nacido, el pequeño Levi.

La mujer dio positivo por el virus sólo días antes de concretarse el parto, dando a luz hace tres semanas, no obstante, jamás pudo conocer al recién nacido, debido a la precauciones que tomaron respecto a la letal enfermedad.

“Esto está atacando el núcleo de nuestra humanidad: espiritual, física, cultural y socialmente”, se lamentó Tebabu Asefa con el medio Fox 5, sobre el deceso de la mujer, que dejó otros tres hijos, Mihret (17), Naod (10) y Asher (4).

Los amigos de la fallecida crearon una campaña en la página GoFundMe para recolectar fondos e ir en ayuda de la familia, ante tamaña pérdida.

Wogene era amable, alegre y una fuente de fortaleza para su familia y para todos los que la conocían. Ella deja a su esposo Yilma Asfaw Tadesse, y a sus amados hijos”, dice parte de la decripción, algo que ha dado su frutos ya que sólo en un par de días consiguieron 200 mil dólares, aunque la meta son 250 mil de la divisa americana.

“Ella significó mucho para nuestra comunidad, nuestra ciudad, entre la comunidad etíope en nuestra ciudad y en su familia. Es una pérdida trágica para todos nosotros”, señaló la alcaldesa de Takoma Park, localidad donde residía la mujer, junto a su familia.