Una emotiva carta fue publicada a comienzos de septiembre en la plataforma de Linkedin. En ella, el presidente de la fundación FinOps y empresario J.R. Storment habló de la muerte de su hijo Wiley, de 8 años.

De acuerdo al medio norteamericano Huffington Post, una epilepsia benigno infantil fue la causa de muerte del menor, lo que inspiró a su padre a reflexionar en un escrito titulado “Es más tarde de lo que piensas”.

“Generalmente desaparece en la adolescencia y solo 1 de cada 4.500 niños con epilepsia muere”, reveló Storment.

Por otro lado, el conmocionado padre comenzó la carta confesando sobre cómo se enteró del fallecimiento de su hijo, narrando que se encontraba en una reunión de trabajo cuando recibió la llamada de su mujer dándole la triste noticia.

El presidente de la fundación relató que tanto él como su esposa tenían la norma de responder el teléfono en caso de que uno de los dos llamara, y eso fue lo que sucedió. Contó que paró la sesión de trabajo y le respondió, conversación en que le informó que el pequeño había muerto mientras dormía.

El hombre además recordó que en ese momento estaba con otras 12 personas en su oficina de Portland, en Estados Unidos, hablando de que los últimos ocho años casi no había tenido vacaciones, y que ni siquiera se había tomado una semana.

Un compañero de trabajo tuvo que llevarlo hasta su casa, en donde no pudo ver a Wiley por todo el personal médico y policial que se encontraba en la habitación. Sin embargo, después de tres horas esperando logró entrar y despedirse de su hijo, acariciándole el pelo y preguntándose el motivo de su muerte por más de media hora.

Aunque en el relato no sólo se pueden leer sus palabras, pues Storment también publicó una carta escrita por su hijo, en donde contaba parte de sus sueños: quería ser un empresario para poder desarrollar nuevas tecnologías y casarse cuando fuera adulto.

Por lo demás, declaró que la noche previa a su muerte lo regañó, por lo que tampoco se despidió de Wiley y de su gemelo Oliver la mañana siguiente antes de ir al trabajo. Asimismo, manifestó que se arrepentía de muchas cosas, pero que su señora le recordaba lo mucho que disfrutó la vida su hijo.

“Mi esposa me recuerda constantemente todo lo que hizo: Wiley fue a 10 países, condujo un automóvil en una carretera agrícola en Hawái, caminó en Grecia, buceó en Fiji, usó un traje para una fantástica escuela de preparación británica todos los días por dos años, fue rescatado de un tiburón en una moto de agua, besó a varias chicas, fue lo suficientemente bueno en el ajedrez para vencerme dos veces seguidas, escribió historias cortas y dibujó cómics obsesivamente”, rememoró.

En su historia hace una reflexión y un llamado a pasar más tiempo en familia, además de contar que aún no ha podido volver al trabajo.

“Abraza a tus hijos, no trabajes hasta tarde. ¿Pasas tiempo regularmente con ellos? Si hay una lección que he aprendido es la de recordar que no se pierdan las cosas que importan”, afirmó.

Cerró con la letra de la canción de Guy Lombardo, “Diviértete, es más tarde de lo que piensas”, una canción en la que se da valor a disfrutar de la vida.