El derrumbe ocurrido en Valparaíso la noche de este martes no ha dejado indiferente a nadie. Y es que la tragedia cobró seis víctimas fatales, de las cuales cuatro siguen desaparecidas, dejando en evidencia las falencias que tienen las viviendas y lo peligroso que puede llegar a ser no realizar mantenciones a las casas.

No obstante, también hay otro tema que está latente entre las personas que vivieron el hecho: los efectos postraumáticos que puede provocar la tragedia.

Si bien no todas las personas pueden padecerla después de un evento traumático, también existe la posibilidad de que los síntomas aparezcan años más tarde. Es por esto que Página 7 conversó con el psicólogo Luis Pino para saber más acerca de los problemas que podrían enfrentar, en el presente y el futuro, la comunidad cercana a la casa derrumbada.

Pino precisó que “existe un concepto en salud mental que se llama trastorno de estrés postraumático y que eventualmente puede, a los vecinos que presenciaron esta situación, afectarlos. Ellos podrían desarrollar los síntomas”.

El experto agrega que este síndrome aparece porque la persona presencia una situación traumática, como una guerra, aluvión, terremoto o una agresión sexual. Esto surge si tú eres una de las víctimas o presenciaste el hecho.

El académico de la Universidad de Las Américas indicó que es difícil separar a los vecinos “entre espectadores y las víctimas, porque independiente si tu casa no fue afectada, tú tuviste igual probabilidades de ser víctima, por lo que de igual modo puedes desarrollar los síntomas”.

¿Cómo saber si tengo los síntomas?

En cuanto a los efectos, el psicólogo explica que, por lo general, están asociados “a los trastornos de ansiedad. Va a afectar la memoria, ya que se estará recordando constantemente la situación traumática

Cualquier cosa que la persona perciba igual como la tragedia, como el sonido, el movimiento, el agua, “lo va a asociar a estímulos similares. Eso es lo normal en cualquier persona que presencie una situación así, va a estar más sensible”.

Pero eso no es todo, ya que agrega que el individuo puede tener “trastornos del sueño, que también está asociado a pesadillas que tengas con la situación”.

Explica que “cada persona tiene su sintomatología particular, algunas van a pensar que la catástrofe, que eso es algo que va a seguir ocurriendo y que les puede pasar a ellos, mientras que otros pueden tener mutismo, negar la situación, evitan a las personas, y presentan irritabilidad. Pueden estar presentes todo los síntomas o solo algunos”.

El académico precisa que “lo normal es que una persona durante un periodo máximo de un mes esté experimentando de manera decreciente esta sintomatología. Si esto pasa el mes, vamos a hablar de un síndrome”, precisó.

Cómo afrontar una catástrofe con niños

Luis Pino señala que lo principal es darle contención a los menores que vivieron una situación catastrófica.“Lo primero que debe hacer un adulto con un menor que vive una tragedia, es contenerlo, tratar de llevarlo a la realidad. No convencerlo agresivamente, imponiendo que esto no es real, que no va a pasar nada, sino acompañarlo, saber que está ocurriendo”, indicó.

Añade que “lo esperable es que los niños no tengan tantas herramientas como los adultos. Sin embargo, para que un adulto las desarrolle, tiene que ver con la crianza y cómo te han contenido en situaciones traumáticas”.

Para finalizar, Pino recomienda que los vecinos y las personas afectadas por el derrumbe se reúnan con expertos. “Si tú eres capaz de juntarte y trabajar de forma grupal, te va a ayudar a atenuar”, finalizó.