La tercera edad siempre se piensa como una época de disfrute de las personas, después de toda una vida trabajando, pero en Chile, la realidad está lejos de ser así.

Según cifras de Chiledeudas.cl, en base a estudios de Universidad San Sebastián-Equifax, sobre el 13% de los morosos chilenos son adultos mayores, con más de 600 mil personas en este grupo. Sus incumplimientos financieros promedio alcanzan $ 1,8 millones y la cifra triplica a sus ingresos promedios mensuales, que no superan los $ 600 mil.

Pero el director de Chiledeudas.cl, Guillermo Figueroa, cuenta una situación todavía más alarmante: cerca de 50 mil adultos mayores, que tienen una Pensión Básica Solidaria, que apenas sobrepasa los $107 mil al mes, están en la categoría de morosidad, con incumplimientos financieros que, en estos casos, registran $ 750 mil, siete veces más que sus ingresos.

Esto es muy preocupante, dado que la toma de deuda por parte de los adultos mayores en Chile es bastante costoso y para poner en contexto esta cruda realidad, estas personas ancianas utilizan los dineros para comprar medicamentos y costear sus procesos médicos, esto es, para subsistir”, revela el experto en endeudamiento responsable.

En tanto, de los casi 4 mil casos de quiebras personales concretados el año pasado, el 15% tiene que ver con adultos mayores, llegando a 600 procesos. Acá, las personas pueden acogerse a procesos de renegociación de sus deudas, lo que debe ser aprobado por sus acreedores, o bien, tomar el camino de liquidación de sus bienes, lo que es más doloroso para el implicado.

Y de acuerdo con el ingeniero comercial, más del 40% de los casos que ingresan a Chiledeudas.cl solicitando defensoría, implican a gente de la tercera edad. “Testimonios hay muchos, y con nuestra ayuda, finalmente logran una salida de su grave situación financiera, que para una gran cantidad de personas significa el embargo de sus bienes conseguidos con tremendo esfuerzo, como sus casas”, declaró Figueroa.

“Este tema sigue siendo pan de cada día en nuestro país y requiere cambios tanto a nivel legislativo como en educación financiera, donde se debe entender que las deudas no deben superar el 50% de los ingresos mensuales”, cerró el especialista.