A pesar de poner en riesgo su vida por esta práctica, el fisicoculturista brasileño Valdir Segato, continúa inyectándose aceite en sus bíceps para aumentar su anatomía.
Todo comenzó en su juventud, cuando se volvió adicto a las drogas, lo que provocó que tuviera una aspecto flaco y demacrado. Perdió tanto peso, que era conocido en su localidad como “el perro flaco”.
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“Me involucré con las drogas y comencé a perder peso, llevas una vida equivocada”, reconoció Segato en entrevista con el medio inglés Daily Mail.
Para cambiar su apariencia radicalmente, el hombre dejó las drogas y se inscribió en un gimnasio. Sin embargo, él quería efectos más rápidos, por lo que optó por inyectarse synthol, una sustancia que aumenta el volumen de los músculos.
Desde la década de los 50, Segato lo ha estado usando, siempre con el riesgo de sufrir accidentes cerebrovasculares e infecciones.
Sus grandes bíceps y pectorales lo han llevado a ser comparado con Hulk e incluso actualmente es conocido como “el monstruo”. “Me llaman Schwarzenegger y He-Man todo el tiempo y eso me gusta”, reconoció el hombre que comparte las fotografías de su cuerpo en Instagram.
“He doblado mis bíceps pero todavía quiero ser más grande”, reconoció orgulloso de su cuerpo, llamándose a sí mismo ‘Valdir Synthol’ en redes sociales, haciendo referencia a la sustancia que se inyecta.
No obstante, debido al daño a los nervios y la desfiguración muscular tiene, lo llevó al borde de enfrentar una amputación hace 3 años. “Los efectos secundarios del synthol son múltiples y también pueden provocar un infarto al miocardio, apoplejía cerebral y complicaciones infecciosas”, detalla el Europa PubMed Central al sitio inglés.
“Los médicos me dicen que lo detenga, el consejo que me dan es que deje de usar. Pero es mi decisión usarlo porque quiero, porque me gusta”, sentenció Segato.
