El domingo se llevó a cabo una nueva marcha para exigir justicia por niñas y niños asesinados, siendo Coté López una de las figuras públicas que motivó a sus seguidores a participar de esta actividad.
“Por favor (asistan), por todos los niños que ya no están y que sus padres no pueden escuchar sus sonrisas, no pueden sentir su piel y su aroma”, escribió la empresaria.
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Horas después, cuando la manifestación ya había culminado, Coté López nuevamente usó su red social, pero esta vez para lanzar una dura crítica sobre la convocatoria.
“Cada vez que llego a casa luego de estas marchas, siento una pena horrible por la sociedad en que vivimos. No puedo creer que cuando se trata de nuestros niños no somos capaces de llenar las calles del país”, partió el texto de López.
La escritora señaló que en la marcha hubo madres que le contaron que algunas figuras públicas “no quisieron compartir (información) en sus Instagram ‘porque no era parte de su contenido'”.
Luego, Coté afirmó que le daba “rabia” que el tema no tenga la atención necesaria y que, desgraciadamente, todos están expuestos a sufrir el homicidio o abuso de un hijo, primo, sobrino o nieto.
“Lo que piden los padres de miles y miles de niños asesinados o abusados es una ley que cuide de nuestros niños (sí, también de sus hijos jueces que dejan en libertad)”, expresó.
“No puede ser que el dolor profundo y desgarrador de un padre y una madre que perdió a su hijo quede invisibilizado. No lo acepto, no puedo”, agregó Coté.
La empresaria explicó que lo que se pide con la ley es que se sentencie con cadena perpetua a los autores de los delitos, “para que nadie se atreva a volver a tocar a nuestros ángeles”.
“Es insoportable solo intentar imaginar un día de mi vida sin sentir el aroma de mis hijos, su piel, oír sus sonrisas”, comentó Coté.
“Quienes están luchando por nuestros hijos jamás volverán a tener a los suyos, y no somos capaces de mostrar empatía al asistir, divulgar y luchar junto a ellos. Estoy muy, muy mal. No puedo seguir, pero solo espero que la próxima marcha salga Chile entero a exigir justicia ¡Los niños no se tocan, por la mierda!” (sic), concluyó.
