Gracias al internet y a las diversas plataformas como redes sociales, los amigos de lo ajeno no pierden oportunidad para hacer caer a quienes no se manejan mucho con estas herramientas.

Así lo dejó en evidencia la doctora y presidenta del Colegio Médico Izkia Siches, quien compartió una captura de WhatsApp, a través de su cuenta de Instagram, dando cuenta que intentaron estafarla.

Para lo anterior, la dirigenta explicó que se hicieron pasar por una amiga, a la que anteriormente le habían ‘hackeado’ el servicio de mensajería instantánea.

“Hoy me intentaron hacer el ‘cuento del tío’, haciéndose pasar por mi amiga Gisol. Cuando vi el mensaje la llamé inmediatamente y confirmé mi sospecha. Si alguien te pide plata, antes que todo llama para confirmar“, partió señalando junto a la captura.

Izkia, explicó cómo los estafadores lograron engañar a su amiga. “La llamaron de ‘Yapo’, pues había publicado un auto a la venta. Le pidieron un código de identificación que le llegaría a su celular y así le robaron su WhatsApp y fueron por cada contacto. Lo bueno es que no caímos”, afirmó.

Respecto a la breve conversación que mantuvo Siches con quienes intentaron hacerla caer, se lee que esta “amiga” se había quedado sin posibilidad de hacer transferencias bancarias, ya que llegó al límite diario, y le pedía a Izkia que por favor hiciera un depósito por ella de 80 mil pesos.

Según los mensajes, Izkia no puso inconvenientes para ayudar a su amiga, quien le pidió que transfiriera ese momento a otra cuenta. Finalmente, la conversación queda en que la otra persona le envía los datos y le pregunta “¿Te espero?”.

Código de seis dígitos de WhatsApp

En marzo pasaso, la Policía de Investigaciones (PDI) alertó sobre una nueva estafa que se ha registrado en WhatsApp, donde sujetos engañan a los usuarios para obtener un código de autenticación de seis dígitos, que les da acceso a la cuenta, los datos personales y todas las conversaciones.

El delincuente contacta al usuario mediante mensaje o llamado y le indica que por error se envió un código de seguridad por SMS a su teléfono y se lo pide.

De esta manera, se hacen pasar por la persona del número solicitando ayuda monetaria inmediata, tal como lo hicieron con Izkia.