El viernes pasado la conocida abogada Helhue Sukni compartió un video en sus redes sociales donde se mostraba fumando y bailando durante una junta en su hogar.

En la oportunidad expresó su felicidad porque después de mucho tiempo volvía a compartir con otras personas que no fueran sus hijas.

La abogada comenzó a enumerar a las personas que estaban en su casa haciendo un asado, las que totalizaban al menos ocho.

“Estar encerrada, estar sin gente es penca y ver gente nueva… hoy he visto a cinco personas nuevas”, expresó, enfatizando que no se reunía con ellas desde hace siete meses.

“Si llega la policía, a dar cara no más”, señaló, al incumplir el aforo permitido. A su vez, expresó que lo único que ha hecho es “trabajar y trabajar. No estoy bien, estoy cansada, de los problemas, porque no todo lo que brilla es oro. Pero estoy feliz”.

“Video de la funa”

Casi cotidianamente la abogada graba videos y los sube a Instagram, donde habla de distintos temas. Este martes lo hizo para responder a una “funa en la tele” que le hicieron por la reunión que realizó en su casa, sin decir quiénes fueron.

“Dijeron que la tía Helhue había hecho un video -que no es mentira- de un asado en mi casa. Dijeron que estaba de carrete ¿Cuál es el problema, amigos? ¿Es que estamos en pandemia? ¿Cuál es el problema si invité a cuatro personas?“, planteó, detallando que en su casa son cinco: ella, sus tres hijas y la empleada doméstica.

“Invito a cuatro personas, somos nueve… y el máximo son cinco, o sea la mujer que vive con su marido y tiene cinco hijos, son 7 ¿tienen que echar a la calle a dos para poder vivir? ¡A dónde la vieron!”, expresó.

En este sentido envió un directo mensaje: “Así que los que agarran pantalla gracias a mí, ¿qué les puedo decir?”, preguntó, haciendo un gesto con la boca y su mano.

“No, filo, da lo mismo. Digan y hagan lo que quieran. La tía Helhue vive en su mundo feliz. Ahora voy a empezar a hacer asados todos los viernes para invitar gente”, advirtió, descartando la opción posteriormente.

Para finalizar, aseguró que “la cuestión de las fiestas masivas te creo, porque andan todo los gallos pegados, pero una que es normal y vive tranquila…”, haciendo referencia a que en su casa se respetaban las distancias.