Sin duda, los turistas ingleses protagonistas de esta historia quedaron con un recuerdo que jamás olvidarán.

De acuerdo a The Guardian, todo comenzó cuando Justine Latton viajó junto a su esposo a la isla de Tazmania, en Australia, lugar donde fueron testigos de cómo una enorme araña Huntsman devoraba a una zarigüeya.

Esto mientras se encontraban en su habitación de hotel del Parque Nacional Mount Field, el cual es conocido porque allí conviven una serie de arácnidos y marsupiales.

Según Justine, la zarigüeya ya estaba muerta cuando la araña comenzó a devorarla, situación que los dejó sumamente asustados, pero no lo suficiente como para no registrar el momento.

Las imágenes, que causaron furor en redes sociales, fueron publicadas en un grupo de Facebook por Justine, donde detalló que estuvo alrededor de 30 minutos presenciando el espectáculo.

Hasta el momento, su post registra cerca de 7.000 compartidos y tiene un millón de reacciones, la mayoría destacando lo insólito del momento.

Puede crecer hasta los siete centímetros

El experto en arácnidos Graham Milledge, explicó al medio británico que era “un evento muy extraño de ver en la naturaleza“, ya que este tipo de araña y zarigüeyas tienen tamaños similares, aunque destaca que las segundas son más veloces y que pueden llegar a medir hasta siete centímetros.

Y precisó: “Es la primera vez que veo una zarigüeya pigmea como presa. Lo más probable es que el arácnido haya querido tragar sus líquidos digestivos y no necesariamente comer su carne”.