Daniela Ramírez es una reconocida actriz que ha participado en diversas producciones cinematográficas y teleseries, siendo una de las más populares Amanda (2016).

Tras finalizar Casa de muñecos en Mega, la actriz decidió emigrar a Canal 13, donde asumirá un nuevo desafío en la próxima teleserie vespertina de la señal, llamada En la puerta del horno.

En una entrevista exclusiva con Página 7, Daniela Ramírez reveló qué la motivó a cambiar de canal y cómo se siente en su nueva casa televisiva.

Sobre su salida de Mega, la actriz señaló que si bien le habían presentado otro proyecto, decidió darle un giro al trabajo que venía realizando.

“Me querían ahí, pero en realidad decidí apostar y por movilizar un poco la vida, los proyectos y el trabajo”, expresó.

Respecto a su llegada a la señal de Luksic, Daniela confesó que está muy contenta porque probará un nuevo formato de horario (vespertina). “Canal 13 es muy familiar para mí, lo pasé súper bien cuando hice Secretos en el jardín.

Instagram | Daniela Ramírez
Instagram | Daniela Ramírez

Además, se mostró ansiosa por trabajar en la teleserie con Vicente Sabatini —director de clásicas producciones como Sucupira y Romané— y con actrices como Tamara Costa y Catalina Guerra. “Hace tiempo que quería hacerlo (…) Estoy encantada, hay química, encuentro que hay una energía muy buena onda”, agregó.

Su nuevo personaje en En la puerta del horno

En la puerta del horno narra la historia de dos familias que se enfrentan por una gran herencia, las Panaderías Catalán, luego que se descubriera que el patriarca, Fernando (Cristián Campos), tenía dos esposas.

En el drama, Ramírez interpreta a Dafne, la hija de una de las esposas y quien está locamente enamorada de Rafael (Matías Assler), quien luego descubre que es su medio hermano. “Tengo un muy buen problema”, expresó Daniela entre risas.

Por último, sobre esta temática, la actriz reveló que ha investigado y a muchas personas les ha ocurrido que en un momento de su vida descubren que tienen más familiares. “Hay personas que lo normalizan. Es un poco ridículo y divertido a la vez, lo estamos tomando con mucho humor”, concluyó.