Gran consternación provocó en Conchalí, la muerte de dos abuelos en extrañas circunstancias en julio pasado. Fue Jorge Olivares de 84 años, quien le disparó a su esposa Elsa Ayala (89) y luego se suicidó. De acuerdo al testimonio de sus cercanos, estas personas habrían acordado morir juntos.
Tras darse a conocer este lamentable caso, se abrió una ventana a la compleja realidad que viven muchas personas mayores en nuestro país, principalmente a la depresión que puede atacarlos y que podría derivar en el suicidio.
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En este contexto, la docente de la Escuela de Enfermería de la Universidad Central e integrante de la Red de Enfermería en Salud del Adulto Mayor, Carolina Núñez, explicó a Página 7 los síntomas que una persona de edad avanzada puede presentar, para estar alerta.
De acuerdo a sus conocimientos, la depresión en las personas mayores, a veces es difícil de identificar, ya que no cumplen con el cuadro clínico en relación a los jóvenes. No obstante, existente conductas que podrían ser muy notorias en este plano.
¿Cómo identificar la depresión de una persona mayor?
“Una persona mayor con depresión presenta un bajo estado de ánimo, sentimientos negativos como tristeza, desilusión, frustración y manifiesta desesperanza, pierden la satisfacción de vivir”, explicó la especialista sobre los síntomas psicológicos.
En el plano físico, hay que estar alerta cuando comienza a dejar de lado las actividades de la vida diaria. “Por ejemplo, si participan en centros comunitarios o juntas de vecinos y empiezan a perder la asistencia de esas actividades”, describió la Núñez.
A medida que el cuadro se va haciendo más crónico, pueden ir perdiendo la motivación para por ejemplo salir de su casa, no tener ánimo para preparar algo para comer, aislarse en su pieza, etc.
¿Cómo ayudar en estos casos?
Si conoces a alguna persona mayor que esté atravesando por problemas como este, se recomienda acercarse al Centro de Salud más cercano y comunicar esta situación. Ellos tiene equipos que pueden asistir al domicilio del afectado y hacer una evaluación más integral.
Cabe destacar que según las estadísticas que se manejen sobre los casos de suicidios en personas mayores de 80 años, fue en el 2000 cuando se empezó a ver un incremento en esta tasa.
La Encuesta de Calidad de Vida (ENCAVIDAM) revela que un 43,7% de las personas mayores calificó su salud como regular, reflejando la importancia de incorporar el concepto de “agregar vida a los años”, en vez de “años a la vida”. En este punto, el dolor físico ocupa un lugar relevante, el cual afecta a aproximadamente a 1,5 millones de personas, que ven limitadas sus actividades normales de la vida diaria y su bienestar.
Algunas de las principales causas reconocidas sobre el suicidio, hacen referencia al diagnóstico de algunas enfermedades crónicas, la pérdida de la funcionalidad, la jubilación, la soledad o la muerte de un hijo.
