José Antonio Neme se tomó un momento este lunes en Mucho Gusto para analizar el crimen de la carabinera Rita Olivares.

Recordemos que la sargento fue asesinada el pasado fin de semana en Quilpué, luego de que asistiera a un procedimiento por robo.

“No es normal que todas las semanas esté muriendo un carabinero. Voy a decir algo que nadie ha dicho y lo voy a decir, porque es lo que realmente pienso: en cualquier país del mundo medianamente civilizado, y puede que no suene políticamente correcto, en una emboscada de 30 y tantos disparos, esas personas que tenían prontuario estarían muertas en su propia ley”, partió diciendo.

“Perdón que lo diga, no es que uno le desee la muerte a nadie, pero si hago una emboscada y mato a un funcionario de seguridad, es sensato pensar que esas personas lo estarían en cualquier parte del mundo”, agregó.

Tras decir esto, mencionó a los Navy Seals de Estados Unidos (su principal fuerza de operaciones especiales de la Armada) o los funcionarios de elite francesas, que tienen otro tipo de formas de trabajo.

“No nos sorprendamos por este tipo de acciones. La ministra decía ‘estamos trabajando en la agenda legislativa’, pero es muy ingenuo pensar que esto es un problema de agenda legislativa”, expresó el periodista.

“Me da hasta ternura, porque evidentemente las leyes ayudan, pero cuando te matan un policía todas las semanas no es solamente un tema legal”, arremetió Neme.

Por lo mismo, el animador de Mucho Gusto quiso lanzar un duro descargo respecto a lo ocurrido con la sargento Olivares.

“Insisto, y lo digo con responsabilidad, pero hablamos de una carabinera brutalmente asesinada. Pero desafío al mundo político, cuál es la reacción de las policías cuando llegas a un lugar y los reciben con disparos, ¿qué hacen? ¿Sacan bombitas de agua? En cualquier parte del mundo la orden es a matar”, expresó.

Tras decir esto, Neme comentó que no le deseaba la muerte a nadie “pero es completamente lógico que si un grupo de delincuentes que sale disparando, sin control, son un peligro público, y hay que derribarlos como sea”.

“Perdón que lo diga, van a decir que estoy loco, pero no estoy loco. Loco es al revés, pensar que uno puede dialogar con esas personas”, sentenció.