Este martes, en un nuevo capítulo de Juego Textual, Katty Kowaleczko, Tita Ureta, Begoña Basauri, María Jimena Pereyra, Pepi Velasco, Chiqui Aguayo, Rayén Araya y Yazmín Vásquez  conversarán con Paty Cofré.

La artista recordará grandes momentos de su vida profesional, por ejemplo, su legendaria pelea hace 60 años con su compañera del Bim Bam Bum, Iris del Valle, quien la agredió sobre el escenario por celos luego de que la comediante destacara demasiado cuando la reemplazó.

Tuvieron que correr las cortinas, me seguía a patada limpia, me sacó la mugrienta”, revelará, agregando que, debido a su meteórica carrera, siempre fue objeto de abusos de parte de sus compañeras.

“Era pura envidia, no más. A mí me rompían los zapatos, me cortaban los bikinis. También me echaban cerveza en el maquillaje. Se ensañaban conmigo, pero yo decía que aquí tenía que estar, no me iba a ir si no me echaban”, dirá.

Paty Cofré y su complejo embarazo

Además, Paty repasará cuando quedó esperando a su único hijo, Yerko, y fue víctima de violencia de parte del padre.

“Él supo que estaba embarazada y empezó a renegar. Me dijo ‘esa cría, quizás entre cuántos te la hicieron’. Además, me golpeaba mucho”, contará.

Posteriormente, la humorista recordará a su esposo, el músico Alejandro Zagal, quien partió como admirador suyo y se convirtió en su gran amor.

Era rubio, de ojos azules, era lindo. Pero no me gustaba, yo era medio regodeona para mis cosas”, confesará.

Lamentablemente, Alejandro sufrió una serie de infartos cerebrales que lo dejaron paralizado, hasta que en 2007, de vuelta de una grabación de una película, le avisaron por teléfono desde la clínica que había fallecido.

No alcancé ni a despedirme de él. Yo lo amaba como lo amé desde el primer día”, señalará, emocionada, sobre su marido.

Finalmente, acerca de Kike Morandé, Paty Cofré indicará que guarda muy buenos recuerdos del animador.

“Para mí Kike ha sido el mejor jefe, y he conocido a muchos. Es un hombre preocupado de la gente que trabaja para él. Nunca lo he visto llegar choreado o sin saludar. Él es maravilloso y lo quiero como un hijo”, dirá sobre el exrostro de Mega.