La noche del martes, en el programa Tal Cual, Jordi Castell sorprendió a Raquel Argandoña y José Miguel Viñuela al revelar que, años atrás, tuvo una fugaz relación con un joven escort. Sin embargo, el romance no duró mucho antes de que el fotógrafo empezara a cuestionarse los riesgos de seguir adelante.

“Lo conocí en un cumpleaños, en la casa de un amigo. Un cabro muy buen mozo. Yo estaba soltero, recién volviendo de vivir en Chicago”, comenzó diciendo.

Lo que más me gustó fue que nos presentaron y me dijo ‘¿cómo te llamas?’. Eso me ralló porque pensé ‘qué maravilla que no sepa quién soy'”, añadió.

En la misma fiesta, con el paso de las horas, el coqueteo llevó a que Jordi le propusiera ir a su departamento.

“Me dice ‘hay algo que tienes que saber: soy escort’“, contó, ante lo que él aclaró que no había posibilidad de pagarle. Sin embargo, el otro joven le respondió que no pretendía cobrarle.

“Estuvimos saliendo como tres semanas y tuvimos un romance”, reconoció posteriormente, agregando que igual había cierto morbo por estar con un trabajador sexual que no le cobraba por sus encuentros. “Una vez me dijo ‘contigo hago cosas que no hago con mis clientes'”, destacó Castell.

Pese a que le gustaban mucho las características de este joven galán, el panelista de TV+ reconoció que siempre puso “el freno de mano, porque dije ‘con él no puedo salir a la calle’. Me las puedo dar de muy moderno, pero se me sale lo cartucho“, confesó.

Jordi Castell escort
Captura | TV+

Así terminó el romance de Jordi Castell con joven escort

En ese punto, Jordi Castell señaló que se imaginaba estando con él en un restaurante, por ejemplo, y “me daba nervio que viniera un cliente que lo viera conmigo”.

Entonces, Raquel Argandoña quiso saber cómo terminó esa historia.

“Estábamos en mi casa un día como a las 6 de la tarde. Se había quedado a alojar la noche anterior y me dice que se tiene que ir. Le pregunté si se iba a trabajar y me dijo que sí“, recordó el fotógrafo.

“Me costó retomar después de eso, y empecé a chutearlo. Daba morbo hacerle gratis las cosas por las que él cobraba… no sé. Fue una época mía bien salvaje. Ahora estoy tranquilo”, reflexionó también.

Por último, Jordi contó que volvió a ver a este hombre un par de veces después de eso. “De hecho, me lo encontré hace como dos meses en un cumpleaños, con gente que yo veo frecuentemente. Él estudió ingeniería civil y le va regio, trabaja en una empresa, pero le gusta ser escort porque tiene clientes que viajan a Chile y le pagan mil dólares por el fin de semana”, reveló.

“Desde el minuto uno fue bien decente y me advirtió que no iba a poder engancharme de él porque me iba a chocar la situación. Y así fue. Me duró 3 semanas y me chocó“, concluyó.