La noche de este lunes, en El Discípulo del Chef se inició una nueva semana de competencia, que dejó al primer participante en riesgo de abandonar el programa, que resultó ser Rocío Marengo.
Luego que el equipo rojo perdiera la competencia grupal, Sergi Arola decidió nominar a la argentina, por una particular razón: “Exceso de cachondeo”, explicó molesto el hispano.
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Sin embargo, también hizo una autocrítica, antes de lanzar el nombre de la trasandina: “Al que le tendrían que poner la polera negra es a mí, por no leer bien la prueba”, dijo Sergi, haciendo un mea culpa.
Y si bien destacó que en general “el equipo tuvo un buen desempeño”, sí hubo algo que no le gustó: “Hay una cosa que me molesta y lo siento, pido disculpas a los espectadores y a todo el mundo, que es el exceso de cachondeo”, comenzó argumentando.
“A mí me han educado con que la sonrisa es buena, la risa es mala. La risa está bien en tu casa, viendo la tele, no trabajando y mucho menos cuando tienes un reto como este”, enfatizó el chef, nominando a Rocío Marengo.
“Lo siento, no puedo, es superior a mí. Cuando lo veo en los otros equipos, me molesta y cuando lo veo en el mío, me molesta tres veces más. Me gusta la broma, el buen humor, pero me molesta el cachondeo, el ir a las otras cocinas… la verdad, si puedes evitarlo, evítalo”, le espetó a la exfinalista de Masterchef Celebrity.
Rocío Marengo pidió disculpas
Tras esto, Rocío Marengo se excusó por su comportamiento. “Pido disculpas, no sabía y como hay un clima alegre, en donde somos amigos de los otros equipos…”, alcanzó a decir, siendo interrumpida por Arola.
“Yo lo entiendo, pero es una competencia, donde al final tiene que llegar uno y al que le toca estar aquí y soltar todo este rollo es a mí“, afirmó.
Por último, Marengo indicó que “estoy aquí para aprender y ojalá seguir en competencia mucho tiempo. Será todo parte del crecimiento y el aprendizaje“, comentó en el programa gastronómico.
“Me equivoqué, pido disculpas, no sabía que le iba a molestar tanto, tengo buena onda con chicas de los otros equipos y el ir a visitarlas era parte de aprender, de ver qué estaban haciendo y no lo hice con maldad”, sentenció.
