Uno de los momentos más llamativos de Sábado Gigante, fue la visita de la banda de thrash metal Necrosis, el 28 de mayo de 1988.
La agrupación nacional comenzaba su camino aquellos años en este estilo musical, por lo que vieron una buena vitrina mostrarse en un programa tan popular.
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Sin embargo, Don Francisco se burló sin tapujos de ellos, desde la ropa con la que vestían hasta por letras de sus canciones.
Cuando el vocalista de la banda, Andrés Marchant, explicaba el estilo, el animador no lo tomó en serio y lanzó varias frases.
“Ustedes arrasan con todo”, “¿por qué andan todos tan rotos?”, “puras cuestiones positivas”, “el cantante está como de galleta”, “todo está malo”, dijo Kreutzberger.
Incluso instó, en forma irónica, al público a que hiciera el famoso headbanging, que consiste en mover la cabeza hacia atrás y adelante, característico de artistas de este estilo.
A esto se sumó que en varias oportunidades el comunicador interrumpió la presentación de los músicos.
Las disculpas 30 años después
En agosto de 2018, en el programa ¡Qué dice el público!, que recopila los mejores momentos de Sábado Gigante, Mario Kreutzberger realizó un sentido mea culpa por su actuar, eso sí, 30 años después de lo ocurrido.
El conductor partió explicando que trataron de ubicar a Andrés Marchant para que asistiera al programa, pero él se negó. Luego, inició sus disculpas.
“Todos estos programas que hacíamos eran en vivo, por lo tanto, en la improvisación, a veces uno cruza el límite de donde debiera estar, y uno se equivoca, pero no puede echar pie atrás”, reconoció.
“Al final, después de haber hecho toda esta broma, debiera haber nuevamente escuchado a este grupo y haber respetado lo que hacían”, agregó.
El animador continuó. “Me quiero disculpar. Nosotros, los animadores de televisión, no hacemos cosas para herir, hacemos cosas para divertir, pero a veces, cebados por el aplauso, por las sonrisas, dañamos sin darnos cuenta”.
Por último, el comunicador expresó que “en este caso tengo que disculparme, porque como animador no lo hice bien. Después de la broma, debería haberles dado oportunidad de expresarse a este grupo y no lo hice”.
