La noche del domingo 7 de agosto Chilevisión transmitió el primer capítulo de El Discípulo del Chef, donde tres participantes fueron eliminados antes de iniciar la competencia.

Una de ellas fue Almendra Santibáñez, finalista de la segunda temporada de MasterChef (Canal 13), luego de no ser elegida por ninguno de los tres chefs a cargo de los equipos.

Sin embargo, tuvo la oportunidad de reingresar, tras enfrentarse en un duelo con Carolina Erazo, pupila de Sergi Arola, líder del grupo rojo que quedó en último lugar en la prueba por equipos.

Lamentablemente para sus aspiraciones, Yann Yvin definió como ganadora a Carolina, por lo que Almendra se despidió de manera anticipada del programa de cocina.

En ese contexto, la participante analizó su fugaz paso en Triángulo de Canal 13. “No sé qué pasó… escogieron a todos menos a mí. Recordé tiempos de infancia donde me sentí sumamente humillada”, inició el diálogo.

“La primera derrota fue como un balde de agua fría, no me podía ir sin cocinar, esa es mi gracia. Luego, me dicen que voy a entrar a cocinar con tres del equipo que va a perder, entonces se puso más interesante”, agregó.

El cocinero español decidió ir al frente con las más fuertes, entre los que estaba la ganadora de Top Chef. “Yann Yvin (quien definió los duelos) aparece en escena y me tocó la Carola”, continuó.

Según la concursante eliminada, “fue bien injusto, deberíamos haber luchado los seis juntos y los tres mejores platos para adentro, pero fue en duplas, un duelo. No me gustó mucho”.

“Jamás había cocinado en esa cocina, yo digo ‘¿dónde está todo?’. De hecho, dejé la embarrada, no sabía dónde dejar las cosas, me retaron”, contó.

Por último, se refirió a su duelo con Erazo, a quien considera su favorita para triunfar. “Es profesora de alta cocina… yo creo que va a ser la ganadora. Tiene todo el talento para hacerlo y el carisma para manejar el premio que dan”, cerró.