Hace algunos días, Chilevisión reveló quiénes será los 24 participantes de la cuarta temporada de El Discípulo del Chef, casting en el que destaca Rocío Marengo.
La argentina viene por una doble revancha a la competencia de cocina, pues fue finalista de MasterChef Calebrity y también tuvo un buen desempeño en el ciclo anterior del programa de CHV.
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En conversación con Página 7, Rocío Marengo se refirió a esta nueva experiencia en El Discípulo del Chef, el sensible motivo que la llevó a aceptar la oferta y las amistades que ha formado en el programa.
“En nivel gastronómico que hay en esta temporada es altísimo, de grandes ligas”, partió señalando la modelo, destacando que la competencia está bastante difícil.
Pese a que sabía que iban a estar los mejores, Rocío comentó que no dudó ningún segundo en aceptar la propuesta de Chilevisión.
“Es un honor haber sido convocada en este grupo de gente tan maravillosa y talentosa, que ama la cocina. Me pareció un desafío interesante, porque a nivel personal también me ayudará muchísimo a aprender”, comentó.
La motivación de Rocío Marengo para ser parte de El Discípulo del Chef
Pero esto no fue su única motivación para venirse a Chile y participar en El Discípulo del Chef. Marengo reveló que la razón principal que la llevó a aceptar la oferta tiene que ver con el complejo momento que vivió hace algunos meses.
“Venía de una etapa personal difícil y me pareció bueno canalizarlo a través del trabajo, que para mí siempre ha sido una salida para todo, me da estabilidad”, expresó.
“Me pareció bueno agarrar esta propuesta y volver a Chile, porque el año pasado estuve en Argentina. Tenía ganas de estar acá”, continuó.
A lo que se refiere Rocío es al tratamiento al que se sometió para convertirse en madre, el que lamentablemente no resultó.
“Estoy triste, pero fui muy feliz intentando y luchando por mi deseo”, escribió en mayo.
Además, después de unas semanas de revelar esta noticia, la argentina confirmó su quiebre con el empresario Eduardo Fort, con quien estaba comprometida y llevaba una década de relación.
Rocío Marengo en El Discípulo del Chef: más tensión y nuevas amistades
En esta temporada, la trasandina destacó que se vivirá “con mucha tensión y presión”.
“Todos saben y son buenos, entonces, a la hora de cocinar, (se generan roces) hasta con el mismo equipo. Hay lucha de egos y varias cosas que en otras temporadas no se ven tanto, porque los concursantes no son principiantes”, explicó.
“Acá la competencia es de alto rendimiento y es muy difícil. La lucha de egos es de los que más saben, porque quieren que los platos salgan como ellos quieren, pero todos queremos eso”, acotó.
Pese a estos roces, Marengo destacó que ha formado lindas amistades dentro de su equipo —que según mostró en su Instagram será el rojo de Sergi Arola— y también con concursantes de los otros grupos.
“Con Valentina Ramos, Carolina Erazo, Gala Caldirola, Natalia Duco y Miel Blanca soy muy cercana”, contó la argentina, revelando que esta última le regaló un molde de Hello Kitty, pues sabía que era fanática de este tierno personaje.
