Víctor Díaz, más conocido como ‘Zafrada’, es uno de los participantes más queridos de El Discípulo del Chef, no por nada ganó la segunda temporada con el apoyo del público.

Y hoy nuevamente participará en la cuarta temporada del estelar, en donde se deberá a enfrentar a los mejores de todos los programas de cocina.

Página 7 estuvo en el lanzamiento de la última entrega, donde presentaron a todos los participantes que intentarán llevarse el gran premio: un año de concesión de un restorán en el Casino Monticello.

Fue en ese contexto que Díaz nos contó sus aspiraciones para volver participar y qué espera de esta nueva aventura.

“Vine en la tercera temporada de comensal y después de ver el escenario que tiene ahora El Discípulo del Chef, me daban ganas de estar al otro lado cocinando. Eso fue lo que me motivó cuando me llamaron. Les dije obvio que sí, muy contento, feliz de que me hayan considerado”, partió contando.

En ese sentido, destacó que todos “son muy fuertes, tenemos cocineros que estudiaron gastronomía, muchos amateurs, como yo. Todos han estado en un programa y han llegado a la final, y han ganado también, es una competencia muy reñida y entretenida. Ojalá que nos llevemos bien todos y que le vaya bien al programa”.

Amistad con Yuhui

Mientras estuvo en la segunda temporada, se vio en pantalla la amistad entrañable que formó con Yuhui Lee, no obstante, el joven reveló que están distanciados.

Consultado si siguen en contacto, Díaz fue sincero en decir que “la verdad es que es más una amistad de televisión. Es como lo que pasa acá en la tele más que nada, porque terminó el programa y fue a mi casa una vez y después tuvimos grabando Sabingo”.

En esa misma línea, precisó que “igual compartimos, le tengo mucho cariño a Yuhui. En su momento fue una amistad muy especial, pero encuentro que no fue nada más allá, siempre cuando puedo le trato de hablar y comentarle”.

Finalmente, reconoció que “hablamos súper a lo lejos, él está en sus cosas y yo en las mías”.

Compatibilizar estudios y El Discípulo

Víctor está cursando el segundo año de ingeniería Agrícola, comentando que le ha ido muy bien.

“Debo agradecer a Inacap, porque ellos se han portado súper bien conmigo. Estoy mandando mis trabajos y los días que puedo voy a dar pruebas. Es un doble esfuerzo, pero poniéndole empeño no más. Todo sea por mi futuro y lograr mis metas”, dijo.

“Este año es más complicado porque estoy con clases presenciales. El año pasado me tocó grabar y estábamos en pandemia y fue online. Ahora tengo que viajar a Curicó”, concluyó.