Álvaro Espinoza habló recientemente con el Podcast Chileactores, donde recordó a su perverso personaje protagónico de Pacto de sangre (2018): Benjamín Vial.

El destacado actor nacional trajo a la memoria aquella experiencia, contó cómo construyó el rol y se refirió al impacto que tuvo la teleserie nocturna en los televidentes.

Recordemos que el desquiciado “Señor Rojo” era un médico cirujano, parte del grupo de amigos que escondió el cuerpo de una estríper, quien murió en extrañas circunstancia en una piscina durante la despedida de soltero de Raimundo (Pablo Cerda).

La situación se complica cuando descubren que la fallecida era menor de edad y su madre, Carmen (Tamara Acosta), emprende una desesperada búsqueda junto con la policía de investigaciones.

De este modo, Benjamín junto a su mujer, Trinidad (Ignacia Baeza), descuartizan el cadáver de la bailarina erótica y la hacen desaparecer, dejando atrás toda evidencia que pueda inculparlos.

“Fue un círculo virtuoso de muchos elementos que se confabularon. He hecho hartas teleseries, pero acá el primer capítulo es el libreto completo, de la primera a la última página, sin cortes. Eso es asombroso”, inició.

Luego, el actor destacó el trabajo de los guionistas. “Cata Calcagni y su equipo… hasta el día de hoy le prendo velas. Dije todo el libreto, no cambié una coma, cosa súper inusual porque uno siempre está adaptando, tratando de acercarlo”, aseguró.

“El personaje era asombroso y yo me aprendí la letra. Siempre digo, esta teleserie era tan buena que solo me la aprendí y la dije”, añadió.

En ese sentido, indicó que en la construcción del maquiavélico rol “está solo en el tiempo. Lo único que hice fue modular esos textos, respirar cuando había que respirar, apurarse cuando había que hacerlo”.

“Estaba tan bien escrito y la teleserie tan bien hecha. Pocas veces sucede que cada vez que empieza una escena y tiene un diálogo, hay una acción que avanza y avanza”, complementó.

Impacto de Pacto de sangre en la audiencia

Al respecto, el actor hizo hincapié en que pese al éxito que tuvo, el rating no fue el mejor. “Es un punto de inflexión en el sistema de medición que tenemos. El fenómeno es indiscutible en redes, para cada uno de nosotros la experiencia con el público fue muy potente”, reconoció.

“Teníamos nada de rating, pero todo el mundo lo comentaba. En los ámbitos donde me despliego, de alguna u otra manera, todo el mundo me habló de Pacto de sangre durante meses”, añadió.

“Tuvo una relevancia en los medios muy fuerte, sin embargo, el rating nunca nos acompañó. No recuerdo con quién competíamos, pero nos daban cancha, tiro y lado. Es algo que sucede cada muchos años en la tele, incluso teleseries que son buenas y les va bien”, continuó.

Por último, recordó que incluso se generó merchandising. “Me llegaban poleras, tazones, cuadros, pinturas, dibujos, acrílicos, comics del personaje, como un ícono pop”, concluyó.