La tarde de este jueves, el panel de Me Late analizó algunas anécdotas de la vidente y tarotista Vanessa Daroch. Fue en esa instancia que la periodista Mariela Sotomayor se emocionó hasta las lágrimas al recordar un vívido sueño reciente en el que pudo comunicarse con su prima que falleció el año pasado.
Claudia Villagrán Sotomayor era auxiliar del Hospital de Tomé y madre de dos hijos. Sus cercanos la llamaban por su segundo nombre -Pamela-. La mujer murió el 26 de septiembre tras sufrir un grave accidente en moto.
“Yo sentí que estuve con ella. Cuando uno no puede despedirse de las personas que mueren, queda una sensación muy terrible. Pero yo anoche pude escuchar a mi prima decirme que me quería mucho. Yo le daba las gracias”, comentó la panelista, muy afectada.
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“Las personas que fallecieron y se quieren despedir o tener contacto contigo, aparecen en los sueños”, dijo Daniel Fuenzalida, quien también es muy cercano al mundo esotérico.
“Ellos buscan la forma de encontrarte y a veces aparecen… Justo me pasó, y fue muy heavy porque me desperté llorando, con una mezcla de emoción y pena“, reconoció Mariela.
Por otro lado, indicó que el último tiempo ha soñado mucho con su prima, pero en todas esas visiones “ella no sabe que está muerta y yo tampoco asumo que lo está”.
La emoción de Mariela Sotomayor al recordar a su prima
“La semana pasada también soñé con la Pame, que me iba en un bus con ella”, siguió contando Mariela Sotomayor, añadiendo que este último encuentro fue mucho más potente.
“Desde que ella partió, yo quedé mucho más sola en este mundo. Para mí es algo muy grande que se me fue. Sentir esa compañía, aunque sea en un sueño, es muy bonito”, agregó entre lágrimas.
En ese punto, el conductor de Me Late le preguntó si había tratado de tener contacto a través de alguna médium o vidente, pero Mariela dijo que no.
“Yo soy muy respetuosa de estas cosas. Creo que las personas tienen que ascender. Lo de mi prima fue tan repentino que no quiero molestarla. No soy capaz de pedirle nada. Solo puedo hablarle, decirle lo mucho que la quiero y extrañarla“, respondió.
“A veces me voy al WhatsApp con ella y quisiera escribirle lo que me está pasando. La he necesitado mucho“, sinceró Mariela, apoyada por sus compañeros del programa.
“Cuando desperté y caí en cuenta de lo que había pasado, lloré. Las personas en el fondo nunca mueren. Siempre están ahí porque es imposible que la energía que vive dentro de nosotros se vaya y desaparezca“, refñexionó también.
“Fue como haber hablado por teléfono. Siento que en plano en que ella está, y yo desde aquí, igual nos comunicamos”, concluyó.
