Muy pronto las pantallas de Chilevisión sumarán un nuevo programa de entretención. Se trata del regreso de El Último Pasajero, que contará con la conducción de Juan Pablo Queraltó, y que ya tiene definido a los asistentes del equipo rojo, azul y verde.

De esta forma, el recordado programa contará con la participación de tres conocidos influencers: Valentina Caballero (rojo), Franco Castagno (azul) y Majo Bleach (verde).

Ellos serán los encargados de apoyar, motivar y asistir las pruebas de los equipos, para que sus cursos puedan convertirse en los ganadores de un viaje de estudios con todo pagado.

En ese contexto, Página 7 viajó hasta Argentina para presenciar la grabación del espacio, instancia en donde conversamos con el asistente del equipo azul, quien entregó detalles de cómo ha sido esta nueva experiencia.

“No me siento para nada un líder, siento que estoy acompañando. Ha sido súper bonito y triste al mismo tiempo, cuando gana tu equipo te llenas de emoción por lograr ese sueño de viajar”, dijo.

“Muchas veces te tocan comunas vulnerables, algunos no tenían la posibilidad de lograrlo y lo consiguen. Pero en otras situaciones no se puede…”, lamentó.

¿Por qué aceptó este desafío? “Mi respuesta fue automática. No lo pensé dos veces, siempre había querido participar en El Último Pasajero, lo veía cuando era chico y me emocionaba mucho poder estar ahí”, reconoció.

El comunicador audiovisual también se refirió al cambio de formato, tomando en cuenta que está ligado a las redes sociales.

“Es una plataforma distinta (la TV), el público es muy diferente, estás más expuesto a otro tipo de comentarios. Es raro, actualmente lo estoy procesando, pero me ha encantado lo que he vivido”, indicó.

Cambio de la figura de “azafata”

Consultado sobre la decisión del programa de cambiar las azafatas por influencers, Castagno fue claro. “Me encanta que se haya dejado de lado el tema de la sexualización y que ahora sean asistentes”, señaló.

“Los protagonistas principales de esto son los niños y nosotros estamos para apoyarlos. Somos una especie de pilar, pero los que ganan las competencias son ellos”, añadió.

Por último, el comunicador audiovisual comentó que “me gusta que sea un rol de asistente y no de azafata. También el tema de los juegos, que se haya quitado eso de que te empelotaban y te tiraban agua… se sexualiza una profesión finalmente”.