La pasada semana, Mayte Rodríguez anunció en sus redes sociales que muy pronto abrirá su propia tienda en Maitencillo.

Bajo el nombre de ‘A Marte’, la actriz lanzará su emprendimiento ubicado junto al restaurante Jungle en Maitencillo hacia Laguna de Zapallar, el cual pertenece a Camilo Figueroa, su pareja y padre de su retoño.

Nace desde la maternidad. Sentir que necesito dedicarle tiempo a mi hijo y a esta etapa me hizo querer tener este proyecto paralelo en mi vida”, expresó la artista, en conversación con LUN.

Al ser consultada sobre su futuro en la actuación, la intérprete detalló que “gracias a Dios no me ha faltado trabajo. He tenido ofertas para retomar las teleseries y hacer programas, pero la verdad es que le quiero dedicar tiempo a mi hijo y este proyecto me permite porque manejo mis tiempos y no necesito tener el horario que significa hoy estar en televisión”.

“Quiero estar con mi hijo en su primera etapa y ya luego, tal vez cuando tenga un año, podré retomar lo que más me apasiona que es actuar. Sí, he ido rechazando ofertas. Tampoco quiero abandonarme y dejar de hacer cosas que me mantengan activa y contenta, así que esta tienda me ha tenido súper movida y me hace sentir realizada. Estoy contenta de vivir así la maternidad y seguir trabajando al mismo tiempo”, complementó.

Mayte Rodríguez  y cómo logró coordinar sus tiempos

En tanto, sobre cómo logró compatibilizar los primeros meses de madre junto a su negocio, la hija de Carolina Arregui indicó que “eso para mí ha sido difícil, ya que estoy dedicada a mi guagüita, pero sí he tenido apoyo y mis amigas están ahí”.

“Por ningún motivo dejaré de ser actriz. Siento que hoy las mujeres tenemos una fuerza sobrenatural, donde podemos ser mamás y tener más de un trabajo a la vez. Solo esperaré a que Galo crezca un poquito para retomar labor en la actuación”, declaró.

Finalmente, Mayte Rodríguez explicó por qué decidió instalar su proyecto en el local del padre de su retoño. “Lo elegí a medias, porque mi pareja abrió este nuevo restaurante llamado Jungle, en febrero. Tenía ese espacio y había la opción de poner otra heladería, pero surgió la idea de tener mi emprendimiento en el lugar que estaba vacío, así que fue perfecto”, dijo.

“Encuentro muy entretenido que sea un doble paseo: vitrinear, ver plantitas, decoración, ropa y al mismo tiempo tener la experiencia de comer exquisitos en el mismo sitio, así que nos unimos”, sentenció.