La noche de este sábado se vivió un nuevo capítulo de La Divina Comida, el cual tuvo de invitados a la periodista Alejandra Matus; el actor, Claudio Olate; el ex chico reality, Luis Mateucci y la cantante Flor de Rap.
Fue precisamente esta última quien relató los duros momentos que vivió en su infancia en Antofagasta. La artista contó que fue abusada por el hermano de su madre desde los 9 años.
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“Yo nací en Santiago, mi mamá arrancó de mi papá legítimo, él la golpeaba, era muy atrevido, y en Arica se puso a trabajar y en ese trayecto apareció mi papito Iván, mi gran amor… yo a los dos años lo reconocía como mi padre”, partió señalando.
Con seis hermanos, detalló que su madre “empezó a tener problemas heavy con mi papá. Recuerdo una vez a mi mamá a punto de quitarse la vida, con el cuchillo y nosotros traumados. Se tiraban los platos por la cabeza, yo lo único que quería era ir a la escuela todo el rato, porque lo único que quería era salir de ahí”.
Abuso de su tío
Tras comentar su dura infancia, relató que llegó a vivir con ellos “el hermano de mi mamá, Sebastián. Después resulta que este señor empezó a propasarse conmigo”.
Sostuvo que “entonces empezó a pasarse películas, tenía 9, 10, 11 años, y yo como niña igual. Te juro que hasta siento que me enamoré del hueón”.
La artista indicó que “era chica y sentía que lo necesitaba, y yo misma iba a meterme a su pieza, no le contaba nada a mi mamá, no quería que mi mamá me retará, me pegará o qué sé yo”.
El suicidio de su padre
La cantante ha vivido difíciles momentos en su vida, como cuando su padre Iván, se suicidó.
Flor cuenta que su papá había amenazado a su mamá con hacer explotar la casa, ya que él tenía un explosivo en el botiquín de su colectivo. La cantante revela que ese explosivo le explotó a su hermano y de ahí su madre no lo perdonó.
“Entonces le reventó el explosivo a mi hermano y hasta el día de hoy está lleno de esquirlas, tiene todo el cuerpo marcado, de ahí mi papá desapareció porque lo andaba buscando la policía”, señaló.
La artista dijo que su mamá no lo quería perdonar, “y escucho el teléfono, y contesta mi hermano que le dice: papá, por qué estás llamando a esta hora, son las 5 de la mañana. Y seguro mi papá le dijo, miren para afuera”.
Prosigue su relato, indicando que se asomó por la ventana y ve la explosión y “mi papá dando vueltas en la calle prendido en fuego, gritando. Los vecinos empezaron a tirarle tierra y nosotros así pegados en la ventana mirándolo. Me acuerdo de mi papá peladito entero, no podíamos creerlo, porque él tomó bencina y se echó en el cuerpo y llamaba a mi mamá, Sara…”
Finalmente, contó que “lo subieron y se lo llevaron, en todo ese trayecto me quedé dormida y mi papá me vino a ver, se vino a despedir. Estaba en el sueño, no me dice nada, yo lo veo y quiero intentar ir donde él y no puedo, él me mira y se despide con la mano y cierra los ojitos, se da vuelta y se fue. Nunca más lo vi, de ahí me avisa mi mamá: ‘hijos lo siento, el papá se murió. Fue terrible”.
