Durante este viernes en Mucho Gusto, el matinal de Mega entregó detalles sobre la brutal pelea que protagonizaron dos hombres en plena vía pública.

Este hecho fue analizado por el panel del espacio, en donde reflexionaron sobre los altos niveles de violencia que afectan al país.

En ese contexto, la periodista Tania Mardones tomó la palabra para contar que su madre vivió un complejo episodio.

“Yo les contaba que mi familia la componen muchas mujeres desde que mi tata se fue físicamente, somos puras mujeres. Y mi mamá yo les decía que se exponía siempre a encerronas”, dijo.

Siguiendo con su relato, la comunicadora afirmó que “no quería contarlo, pero finalmente esto me hace ser un aporte a la conversación, porque mi mamá efectivamente fue víctima de una encerrona”.

Ella es emprendedora. Tiene una cafetería que puso en medio de la pandemia, entonces siempre se está movilizando en vehículo porque tiene que trasladar pastelería, todo ese tipo de cosas que se venden en su cafetería”, comentó.

“Quizás hubiese sido un desenlace mucho más terrible”

Estas declaraciones sorprendieron a los animadores de Mucho Gusto, por lo que Diana Bolocco le preguntó cuándo sucedió el hecho.

“Fue el año pasado, a mediados más o menos. Ella se estaba trasladando desde La Florida hasta Puente Alto. Llegó a un sector de Puente Alto donde no hay una comisaría cerca. De repente se detiene un vehículo cerca de ella, se bajan y comienzan a golpear el vidrio del conductor, donde estaba mi mamá sentada. Lo golpearon una y otra vez”, puntualizó Mardones.

Además, agregó que “si mi mamá no hubiese tenido un vehículo con las ventanas reforzadas, que justamente lo tenía porque el otro vehículo estaba siendo arreglado y le pasaron este en reemplazo, y si no hubiesen salido vecinos a socorrerla, la historia sería otra y quizás hubiese sido un desenlace mucho más terrible”.

Finalmente, Tania Mardones cerró su mensaje expresando que “todos estamos expuestos a ser asaltados, a ser abordados de esa forma. Mi mamá ese día quedó muy tiritona, muy asustada, porque finalmente su vida dependía de un vidrio, nada más que eso”.

“Esa es la reflexión que quería hacer solamente para que veamos que todos estamos expuestos, sobre todo las mujeres, somos mucho más vulnerables en la calle y eso lamentablemente está lejos de cambiar”, remató.

Revisa el relato de Tania Mardones