Yasmín Valdés y su compañero Darwin Ruz protagonizaron en una polémica durante su debut en Aquí se baila ¿La razón? Ella quedó en blanco durante su rutina y lo terminaron la presentación.

Como era de esperarse, la pareja fue mal evaluada por el jurado y se desclasificó que el bailarín renunció al espacio. Además, Valdés tildó de “poco profesional” a Darwin por abandonarla en el escenario.

Este viernes, en Me Late, Yasmín Valdés se refirió en más detalle a la polémica de Aquí se baila.

“No culpé al bailarín. Yo cometí el error, yo me fui a negro”, aclaró la también actriz. Sin embargo, aseguró que cuando en una performance alguien comete un error, “uno espera que tu compañero te apañe”.

De hecho, Valdés señaló que ella habría continuado el baile simplemente improvisando, citando la popular frase “the show must go on”, es decir, el show debe continuar.

“Aquí no pasó eso. El bailarín se me taimó, se me enojó, no tengo idea. Yo no decidí parar. Yo jamás he abandonado un escenario”, comentó.

“Estaba deshecha”

Yasmín reveló que cuando vio el momento en TV se sorprendió de “lo compuesta que estaba, porque por dentro estaba deshecha, completamente desarmada, con ganas de salir corriendo“.

Al ser consultada sobre el proceso de selección del bailarín, la concursante reveló que fue ella misma quien llamó a Darwin para que sea su pareja en el programa.

Luego, Andrés Caniulef le preguntó sobre la renuncia de Ruz y el rumor de que, supuestamente, él pidió que le cambiaran a la concursante.

“Sería lamentable, porque fui yo quien lo invitó al programa. Súper poco agradecido de su parte si es que fue así”, expresó.

Luego, Yasmín confirmó que Darwin renunció, pero que ese tema se solucionó. “Tengo entendido que la producción lo convenció (para que se quedara) y seguimos adelante, hasta ahora”, detalló.

Respecto a cómo es su relación actual tras el impasse y la posibilidad de cambiar de bailarín, Valdés fue tajante. “Esto es trabajo, yo lo necesito. Tenga que bailar con él o con quien sea, debo hacer la pega igual”, afirmó.

“Hay compromisos contractuales, no es llegar y decir ‘no quiero baila contigo’. Yo sigo órdenes de dirección, no pasa por mí”, concluyó.