Este jueves Chilevisión emitió un nuevo capítulo de El discípulo del chef, que sorprendió con la renuncia de Patricio Sotomayor.

A Adriana Barrientos y Vanesa Borghi, que conforman el equipo rojo, les tocó trabajar juntas, instancia en la que aprovecharon de recordar hechos del pasado.

Todo comenzó luego que, mientras cocinaban, desde detrás de cámara le preguntaran si limaron todas sus asperezas.

Adriana destacó que “yo también alguna vez fui chica, o sea por favor, yo también alguna vez tuve 20 años, así que también me pude haber equivocado”, haciendo alusión a su madurez actual.

“¿Tú crees que te equivocaste alguna vez con Vane?”, le consultaron, a lo que ella respondió: “Mil veces, no una y no solo con Vanesa, me equivoqué con millones de personas, y también millones de personas se equivocaron conmigo”.

Por su parte, Vanesa señaló que “es parte de la vida” y que esto pasó hace unos siete años, añadiendo que “quizá me aprendieron a conocer un poco más en este programa, pero trato de no hacerme problemas y menos a esta altura. Tengo 38 años; la verdad, chao”.

Acto seguido, Barrientos recordó que “una vez la Vanesa dijo que yo tenía las patas chuecas y que yo era muy flacuchenta. Y una vez me dijo que mis pechugas habían quedado muy grandes”.

La aludida respondió que “si yo digo algo, lo digo en la cara, pero buena onda”.

Finalmente, en el backstage, ambas destacaron que “funcionamos bien, yo creo que es eso, trabajar en equipo. Puede que no seamos amigas, pero el equipo siempre tiene que ser así”.

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