Fue el 13 de octubre pasado que la vida de Ingrid Parra dio un giro en 180°. Y es que la actriz se convirtió en madre por primera vez de Emma.

Ya ha pasado poco más de dos meses desde aquel emocionante momento y la actriz está feliz con junto a su hija y así lo ha demostrado a través de su cuenta de Instagram, donde constantemente comparte imágenes de su pequeña.

Sin embargo, no todo ha sido color de rosa, ya que contó las dificultades que ha debido enfrentar en el proceso de maternidad.

Fue en el programa de TV+, Más Viví que nunca, que sostuvo que su hija sufre de reflujos estomacales, lo que ha ocasionado que su hija se ahogue.

Esta cabra se me ha ahogado varias veces con esta cuestión del reflujo, y esa cuestión sí que es heavy. Una vez estaba en mi casa sola, Cristián (su pareja) había tenido que viajar por pega y se me ahogó”, partió señalando.

Agregó que “fue un segundo que me fui a meter una cuchara para comer, la miré y estaba roja. Yo dije ‘la cagué, se me va a morir’ y la empecé a dar vuelta. Por suerte había hecho un curso de RCP”.

La actriz contó que tuvo que dar vuelta a su hija con la cabeza para abajo, “y le empecé a pegar para que saliera. No salía. Estaba sola. Yo vivo en parcela, para que sepan. Entonces mientras le pegaba fuerte yo gritaba: ‘¡Ayuda, ayuda!’, y yo decía: ‘¿qué vecino me va a escuchar?’ Qué imbécil’”, cerró.

Afortunadamente el hecho no pasó a mayores y para ella “fue un momento de superación máxima”, finalizó.