El plan imperfecto, fue el caso que Carlos Pinto presentó este jueves en Mea Culpa y donde el actor Lucas Mosquera, tuvo la misión de interpretar a Cebastián Cuevas, el criminal de la historia.

Conocido por sus participaciones en teleseries como La Colombiana, Amor a la Catalán y Wena Profe, el joven colombiano contó a Página 7 que es primera vez que da vida a un villano, ya que hasta ahora solo tenía papeles más alegres.

“Mis personajes que había tenido en teleseries eran de chico bueno o toy boy. Siempre estaba pidiendo un papel de malo para variar el repertorio, experimentar en ese ámbito. Entonces esta oportunidad se me vino muy bien”, señaló.

Llegada al programa

Sobre cómo se gestó su llegada al programa de Carlos Pinto, Mosquera manifestó que pensó en postular al llamado que se hizo en redes sociales, pero que antes de contactarse con el equipo ellos lo buscaron.

“Me llamaron de la producción pero ya había visto la convocatoria y estaba a punto de hablarle a la encargada el día martes, pero ella me llama el lunes para ofrecerme el papel”, dice entre risas.

Consultado si conocía el formato antes de participar, Lucas confiesa que se hizo fan del programa en pandemia, donde vio la gran mayoría de los episodios mediante el canal de Youtube de TVN, por lo que fue de su interés ser parte de un espacio que queda en la memoria de los televidentes.

“En este personaje me pedían que hablara como dominicano y yo soy colombiano, así que busqué harto material de personas de esa nacionalidad para dar con el acento”, dijo, para luego precisar que pese a que este punto fue un reto, hace poco se graduó de su curso de doblaje, por lo que “trabajar con la fonética lo tenía interiorizado”.

Lucas Mosquera y lo complejo de su paso por Mea Culpa

En palabras del actor, como nunca había tenido papeles con una carga emocional tan fuerte le costó aclimatarse a su personaje, por lo que el proceso previo de búsquedas sobre el caso y de imágenes del propio Cebastián Cuevas, fue clave.

“Estaba en un tiempo muy hippie, quería que todo fluyera y me costó revestirme de este personaje malo, en medio de una pandilla que eran solo malandras”, señaló.

Sin embargo, insiste en que fue un gusto pisar nuevamente las dependencias de TVN, ya que es la casa de televisión que le abrió las puertas cuando tenía solo 19 años.

“Fue bien emocionante regresar a TVN porque yo empecé en el canal, fue mi escuela, pero significa mucho para mí que cada vez que se necesite a un personaje negro para un papel importante me llamen. Así puedo poder poner una voz de realidad y no dejar que una sala de ejecutivos decida qué es ser un negro o un inmigrante”, destacó.

Y concluyó: “Comentar que si algo está pasando aquí, tener la capacidad de decir que es por esto y lo otro, para que así no pierda la humanidad cada personaje”.