La noche de este jueves, TVN trajo de regreso un clásico de la pantalla chica: Mea Culpa. El icónico programa de casos policiales y crímenes, que es conducido por Carlos Pinto, dio inicio a este nuevo ciclo con un recordado caso.

El conductor del programa ya había adelantado que el capítulo llevaría por nombre ‘Un Cuento Salvaje’, que revivió un crudo caso, que se registró en la localidad de Peñablanca, en la región de Valparaíso.

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La historia trataba sobre Pablo Aravena, quien mató a sangre fría a dos integrantes de su familia y a la asesora del hogar, todo por una herencia.

Cabe señalar que el suceso, en primer lugar, se vinculó a un asalto, aunque en ese momento la policía no entregó antecedentes precisos de inmediato. Sólo se conocía que las víctimas fatales fueron Videca Segovia, de 50 años; Felipe Aravena, de 17 años, y “Toyita”, empleada de la familia.

Por este triple homicidio, Aravena fue procesado y recién en 2013 fue condenado, luego que en una primera instancia el tribunal oral de Viña del Mar lo absolviera de toda culpa.

Audiencia extrañó el humo

Lo cierto es que el retorno del programa dejó felices a los televidentes, quienes destacaron que el programa mantuviera su esencia de los años 90, pero que actualizara algunos elementos, como las imágenes de la introducción, que gustó a la audiencia.

carlos pinto
TVN

No obstante, hubo algo que no dejó del todo satisfecho al público, quien así lo hizo saber en redes sociales: el clásico humo que solía acompañar a Carlos Pinto en cada una de las emisiones.

Si bien algunos notaron que el humo sí estuvo, no fue lo suficiente fuerte, para impregnarle ese ambiente enigmático que hizo famoso al programa, que más de dos décadas después, mantiene la fidelidad de la audiencia.

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