El día 20 de mayo recién pasado Javiera Acevedo, dio la bienvenida a su pequeño hijo Kai, quien se ha convertido en su gran compañero durante estos dos meses.

En conversación con Las Últimas Noticias, la actriz dio detalles sobre cómo ha sido la experiencia de la maternidad, un proceso que define como “maravilloso, desconocido y muy cansador”.

“Recibí el amor más grande del mundo. Conocí a mi verdadero amor, a mi verdadero príncipe azul. Me di cuenta que el amor es todo, absolutamente todo. El amor a tu hijo es el amor más grande que sentirás en tu vida, si no una no podría ser tan, pero tan fuerte como es”, comentó.

Consultada sobre qué le ha sorprendido de la maternidad, Acevedo manifestó que ha sido su capacidad para mantenerse “siempre despierta, con ánimo y contenta. Al verlo a él -que es como verme a mí, es como si tuviera mi alma- se me pasa el cansancio, el dolor de espalda, todo. Ese amor todo lo puede. Uno saca fuerza del amor”, dijo.

Asimismo, sostuvo que durante el segundo mes logró una mayor conexión, puesto que estuvieron más tiempo a solas por decisión de ella, ya que su madre ha sido clave en esta nueva etapa.

“Tengo ayuda un par de horitas a la semana y su papá también lo viene a ver, pero muchos días estoy sola con él y me encanta. Hay días agotadores, sí, pero me dan fuerza para saber que todo lo puedo. Ahora es cuando más me necesita, porque es pura pechuga. Le doy libre demanda y es un regalo poder hacerlo. Me encanta ese momento cuando nos miramos a los ojos, esa conexión cuando estoy amamantando es para llorar. De hecho, te lo digo y me emociono”, indicó.

En tanto, precisó que el vínculo que ha generado con Kai es “maravilloso”, y que su hijo se ha convertido en todo lo que soñó. “Es tal cual como me lo imaginé; de bueno, de risueño y de simpático. Soy la mujer más afortunada del mundo y me gustaría gritarlo a los cuatro vientos (se emociona) porque la maternidad me hizo una mujer extraordinaria. Si antes era una mujer fuerte, ahora soy una fortaleza. Nunca imaginé que sería tan lindo, ni que yo pudiera dar tanto”, concluyó.