A mediados de junio la bailarina Mila Correa preocupó a sus seguidores tras anunciar que fue hospitalizada por COVID-19.

La noticia llegó en un difícil contexto, ya que la exparticipante de Amor a Prueba está dando la pelea contra un cáncer de mama diagnosticado en octubre de 2020.

Hace unos días, Correa publicó una fotografía en su cuenta de Instagram donde habló de su estado de salud y agradeció a los funcionarios del Hospital Salvador.

“Por el momento la única forma que tengo de agradecer es a través de este post (…) Ustedes son excepcionales (…) Gracias porque si no fuera por ustedes, nadie estaría a salvo”, expresó.

Y afortunadamente para la bailarina, finalmente fue dada de alta tras permanecer 10 días hospitalizada. “Si esto no me ganó, nada me la gana”, partió diciendo la bailarina en conversación con el diario LUN.

“Era complicado que yo tuviera Covid porque ya tenía cáncer, por eso me cuidé mucho, pero las cosas fueron distintas”, contó.

Cuando Mila se hizo la octava quimioterapia, sus defensas bajaron mucho y ahí fue cuando se contagió.

Tras presentar fiebre y sentirse muy débil, optaron por internarla, pensando que se debía a la quimioterapia, sin embargo, tras realizarle exámenes vieron que dio positivo a coronavirus.

Creo que cuando me dieron el resultado fue la primera vez que lloré desde octubre. Pensaba ¿en serio? ¿Algo más? Nunca pensé que me iba a morir, solo pensé ¿y qué viene ahora?”, relató.

Su paso por el recinto médico fue, primero, en urgencias y luego a una sala de cuidados, donde estuvo aislada pero muy cuidada. Para ella lo más duro fue no poder hablar con su familia, por lo que después de unos días pudo tener una videollamada y calmar esa necesidad.

Respecto a su estado de salud actual, Mila contó que de a poco ha ido viendo mejorías. “La semana pasada no me salía la voz y me cansaba hasta hablar”, dijo, agregando que ahora recién ha podido atender llamados y conversar.

Sus debilidades van más bien por el lado de la fragilidad en que se encuentra tras las quimios y la hospitalización. “Poca fuerza en mis manos, mis uñas están moradas y cero masa muscular, pero la fuerza no viene del cuerpo, sino que de la mente y esa la tengo con toda la fuerza”, aseguró.

Sobre el cáncer, señaló que está realizando exámenes previos a la supuesta operación a la que debe someterse para extirpar el tumor. “Todavía no sabemos que dirán esos exámenes, porque la evolución del cáncer siempre es un misterio, pero si las quimioterapias resultaron y el tumor se achicó, podrían operarlo, pero esto es paso a paso”, cerró.