Luis Alarcón fue el invitado de unos de los últimos capítulos de Reyes del Drama, podcast en el que se conversa con distintas figuras del espectáculo y teatro chileno.

El reconocido actor se refirió a cómo fueron sus últimos años en TVN, recordando que no la pasó muy bien en las teleseries Dime Quién Fue o El Camionero, donde no tuvo papeles relevantes.

Fue en 2018, tras dos décadas en la señal estatal, que el intérprete terminó su vínculo con Televisión Nacional: “Me hicieron una oferta para seguir contratado, pero no me interesó así que me vine para la casa”, confesó.

Junto con esto, contó que llegó un punto en el que prácticamente estaba solo en el área dramática, y donde conversaba con la secretaria que este equipo ya se había terminado.

Confesó que TVN le pidió un requisito para seguir vinculado al canal

Durante la entrevista, Luis Alarcón contó que TVN le pidió que formara una empresa para seguir contratado por el canal: “Es una trampa del área respectiva del canal para no pagar la salud, lo que corresponde (…) Yo empujé a (José) Soza para que demande al canal. Ganó su juicio pero le pagaron poco. El arreglo que hice yo junto con Delfina (Guzmán) fue mucho más”, comentó.

Pero independiente de esto, el intérprete explicó que le dio pena salir de la casa televisiva que lo albergó por 20 años, y en donde fue parte de icónicos proyectos, como Romané o La Fiera.

“Era como mi segunda casa. Todo se deshizo. Las directivas del área fueron malas. Yo pienso que por lo menos en el área dramática, desde que a Vicente (Sabatini) lo nombraron gerente de programación, la cosa se empezó a venir abajo porque se hizo cargo la Quena Rencoret, quien lo hizo muy bien pero el área empezó a decaer. Se nombraba a cualquier director que no tenía la mínima idea. La directiva del canal se desinteresó en el asunto y ya no se podía hacer nada”, sentenció.